Técnicos del Ayuntamiento de Sant Antoni y de la empresa Construcciones y Excavaciones Erri Berri (adjudicataria de la demolición) iniciaron esta semana los trabajos de desconexión de suministros de agua y luz de la casa del músico Michel Cretu.

Se trata del primer paso en la ejecución de la sentencia de derribo que pesa sobre la mansión de Santa Agnès, cuya estructura se comenzará a demoler entre el lunes y el martes de la semana próxima tras la llegada a la isla de la «maquinaria pesada» necesaria para los trabajos, según explicó el teniente de alcalde, Joan Pantaleoni. En este sentido, el teniente de alcalde explicó también que estas desconexiones se han realizado también con el objetivo de no dejar sin suministro a la propiedad vecina a la mansión.

De esta forma comienza la cuenta atrás para el derribo de la casa que el afamado músico rumano se construyó en una cima protegida, cuyo plazo de demolición otorgado por el juzgado fue de 18 meses y expiró el pasado 1 de noviembre.

En este sentido, cabe recordar que el Ayuntamiento de Sant Antoni adjudicó las obras de demolición de la mansión a esta empresa navarra, cuya oferta fue elegida por ser una de las más económicas y de menor tiempo de ejecución que se presentaron al concurso público, ya que propone derribar de la casa en un tiempo máximo de 21 días y con un presupuesto de 346.653 euros.

Asimismo, cabe recordar también que el Juzgado Contencioso Administrativo Nº1 de Palma, que instruye el caso, ha procedido a multar al alcalde de Sant Antoni, José Sala, por el retraso en la demolición con mil euros mensuales, unos pagos que Sala ya ha tenido que efectuar durante los dos últimos meses a cargo de su patrimonio personal a pesar de que ha recurrido sanción. En este sentido, el alcalde deberá seguir haciendo frente a estas multas hasta que la mansión no esté demolida en su totalidad.

Por otra parte, el teniente de alcalde, Joan Pantaleoni, explicó que hoy mismo la empresa adjudicataria del derribo comenzará a desmontar los elementos recuperables que aún quedan en la casa, aunque, en su gran mayoría, ya fueron quitadas por la propiedad, según detalló el teniente de alcalde. El mantenimiento de estos bienes ha sido una solicitud constante de la defensa de Cretu, que ha advertido varias veces al Consistorio que no cuidar estos elementos podría significar un perjuicio a su cliente.