Mariano Torres es desde ayer concejal de PSOE-ExC, aunque su participación en el grupo o su trabajo como edil no adscrito se definirá en una asamblea insular. Junto a él asumieron su cargo los ahora ediles socialistas Jorge Roselló y Joan Boned, para suplir la renuncia de tres concejales de ExC, causada por conflictos con el portavoz del grupo, el socialista José Luis Pardo, a quien acusaron de obstruir su trabajo y cobrar «dietas ilegales».

Según explicó Torres, durante la asamblea general de ExC defenderá sus argumentos para querer estar en el grupo municipal a pesar del rechazo de la coordinadora del partido. «Ciertamente ha habido problemas de la dinámica diaria y personales entre los concejales de ExC y Pardo, y eso ha provocado la dimisión de tres regidores, que es grave. Pero yo creo que es necesario reconducir la situación», explicó el edil, para quien «es necesario explicar que en 2011 que nuestro proyecto político sigue siendo con el partido socialista», remarcó, «sin escenificar batallitas internas».

En este sentido, aseguró que su relación con Pardo «a día de hoy es normal, pero con diferencias, lógicamente». «A partir de ahora espero que no tener problemas que impidan investigar», agregó. Por otra parte, si finalmente se decido que Torres se una al PSOE será también porque llega «a un acuerdo por el que sería coportavoz y porque las propuestas y las mociones van firmadas por los dos».