El Juzgado de los Contencioso Administrativo Nº1 de Palma de Mallorca dió ayer su autorización al Ayuntamiento de Sant Antoni para pueda acceder a la casa de Michel Cretu a fin de ejecutar la sentencia de demolición que pesa sobre esta propiedad por estar edificada en un área protegida de Santa Agnès.

El auto emitido por la jueza que instruye el caso, Irene Trunyols, permite por lo tanto el acceso a la mansión de los servicios técnicos municipales y de la empresa navarra Construcciones y Excavaciones Erri-Berri S.L, adjudicataria de las obras, entrar a fin de iniciar todos los trabajos correspondientes a la ejecución del derribo, que, según el Ayuntamiento, se iniciarán «en los próximos días» con la entrada a la vivienda de los servicios municipales «para comprobar la realidad física existente en el interior del inmueble de manera previa al inicio de las obras». De forma simultánea, el Ayuntamiento comunicará el contenido de esta autorización a la empresa adjudicataria del derribo «para que se desplace a Eivissa con el fin de iniciar los trabajos de demolición». «Solicitaremos a la empresa que programe el comienzo del derribo y a la vez haremos un inventario para ver qué es lo que se tiene que salvaguardar», apuntó el teniente de alcalde de Sant Antoni, Joan Pantaleoni, sobre el hecho de que auto judicial no se pronuncia acerca de la petición de la defensa de Cretu de «conservar determinados elementos arquitectónicos-decorativos».

Asimismo, la jueza destaca en su auto que ante esta resolución sólo cabe un recurso de súplica.