Los establecimientos hoteleros de las Pitiüses perdieron durante los dos primeros meses del año más de un tercio de su negocio en comparación con el mismo periodo de 2008, según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Según el organismo oficial, entre enero y febrero de este año se han contabilizado algo menos de 49.000 pernoctaciones, una cifra que representa una caída de 26.500 estancias respecto al mismo periodo de 2008, cuando se rebasaron las 75.400 noches contratadas.

A pesar del mal dato que supone este descenso del 35% en el inicio del ejercicio, la buena noticia es que el análisis de la marcha de cada uno de los meses refleja que febrero mantuvo un comportamiento mucho mejor que enero. Mientras el primer mes del año dejaba menos de 11.000 pernoctaciones y una caída del 45% respecto al mismo mes de 2008 (23.700 estancias), febrero se cerraba con 38.000 noches contratadas, unos guarismos que suponen 13.600 menos que un año antes pero que reducen el descenso en términos porcentuales hasta el 26'4%.

Menos clientes

La contabilidad del INE también refleja que el número de clientes sigue a la baja, con algo más de 13.100 turistas registrados por los casi 17.500 del pasado año (menos 4.400 usuarios).

En el caso concreto de febrero, la reducción es de más de 2.500 clientes (11.280 frente a 8.680). El mercado nacional, como es lógico, es el que presenta una mayor reducción en términos absolutos (pasa de 9.260 a 7.500), si bien la caída en el número de usuarios extranjeros es proporcionalmente mucho más acusada (se pasa de 2.000 a 1.180, un descenso del 41%) y supone la inversión de la tendencia al crecimiento mostrada durante enero, al pasar de 1.000 clientes a casi 1.400.

Si se pone en relación el descenso más acusado en el número de noches contratadas que la cifra de clientes se observa fácilmente que la estancia media también sigue a la baja. En el cómputo bimensual, se ha pasado de una media de 4'2 días a 3'4. En el caso concreto de febrero, la caída es más moderada al pasar de casi 4'6 jornadas a cerca de 4'4.

Las malas noticias siguen también en cuanto a la rentabilidad. A las caídas en la ocupación y noches contratadas se une un aumento de los establecimientos abiertos en febrero (33 frente a 23 el pasado año). De esta forma, no es de extrañar que el grado de ocupación por habitación haya caído de un 64'2% a un 43%.

A pesar de que el número de establecimientos abiertos haya crecido, el personal empleado ha caído ligeramente desde los 342 trabajadores registrados en el segundo mes del pasado ejercicio a los 323 del mismo periodo del presente.