Eivissa recibió ayer una visita multitudinaria de agentes de viaje, que vinieron a la isla por un día, muchos de ellos para conocerla por primera vez.

Fueron 1.150 agentes procedentes de toda España y de Portugal que se desplazaron desde Barcelona a bordo del buque Suvereign, la nueva adquisición de la empresa Pullmantour, que comenzará a hacer cruceros por todo el mediterráneo aunque no recalará en la isla.

La respuesta para esta cuestión por parte de uno de los agentes es que el cliente de cruceros de España le gusta visitar espacios nuevos. «Es un tipo de cliente que ya conoce la isla y que si quiere comprar un viaje a Eivissa es porque quiere playa», apuntó Federico Ibáñez, agente de Viajes Marsans de Madrid, quien destacó: «No es la fiesta lo que vende Eivissa sino la playa».

A bordo de crucero de 260 metros de eslora, la consellera de Turisme, Pepa Marí, y el concejal de Turismo del Ayuntamiento de Eivissa, Vicente Ferrer, hicieron entrega de una placa al capitán del barco, Amadeu José Alburquerque, por haber elegido Eivissa como primera escala en a nueva andadura que comienza el barco en aguas mediterráneas.

Por su parte, la consellera expresó su «orgullo» porque Marsans haya elegido la isla y destacó la importancia de que los agentes «vean la isla» para poder ofrecérsela a los turistas.

Los agentes fueron trasladados desde el dique de Botafoc hasta la ciudad en autobuses y realizaron además una visita guiada a Dalt Vila.