A la hora de comer, tapitas varias. Cerca de las 13'00 horas del día de ayer, la carpa se fue llenando de comensales. Foto:GERMÁN G. LAMA

En total habré gastado unos 20 euros entre las tapas que hemos comido mi hijo, su amigo y yo. Venimos desde hace cuatro años porque puedes picar un poquito de todo. En esta edición creo que hay más dulce que salado y por eso no me gusta tanto», explicó María Jesús Díaz, mientras su hijo Roberto puntualizaba: «Mañana {por hoy] a ver si venimos otra vez porque está todo buenísimo».

La cuarta edición de la Setmana Gastronòmica, organizada por el Ayuntamiento de Eivissa, se clausura hoy con la segunda jornada de tapas por un euro que tendrá lugar en la carpa de Vara de Rey de 12'00 a 16'30 horas. Durante el día de ayer, centenares de personas aprovecharon para pasear por Vara de Rey y llevarse a la boca una o varias deliciosas tapas hechas con ingredientes de todo tipo: confituras de cebolla, humus, carne, sobrasada. A los sabores más tradicionales, como el pan, la sobrasada y el queso del restaurante Can Friends, se sumaron los sabores y olores más exóticos de la cocina internacional, como los dulces y tapas árabes que ofrecía Jahida en el stand de La Medina Catering: «Los árabes utilizan mucho los frutos secos en la cocina, por eso la mayoría de dulces están elaborados con nueces, cacahuetes o pistachos».

Una de las principales novedades de este año es la presencia de los Wwofer, voluntarios que se encargan de informar al público dónde deben depositar correctamente los residuos que generan después de haber disfrutado de la comida: «Por lo general, la gente está bastante desinformada porque tienen que mirar los carteles para saber dónde dejar el plástico o el papel. Lo que más confusión genera es el tema de los envases porque, por ejemplo, se lían con una botella de vidrio o un tetra brik», afirmó Àlvaro Vargas, uno de estos voluntarios. María José Real