G.ROMANI

La encuesta realizada por la PIME de Formentera entre sus más de doscientos asociados, revela que para la gran mayoría de ellos 2008 no fue un mal año ya que el 45,6% lo consideran normal y un 26,3% de los encuestados lo califican de bueno frente a un 24,6% que considera que 2008 fue económicamente un mal año.

Lo curioso es que también el 45,6% de los encuestados afirman que las ventas no habían variado en 2008 respecto a 2007, mientras que un 36,8% aseguraban que las ventas habían descendido y la mitad de ellos, es decir más del 18% indicaban que las ventas habían bajado entre un 11 y un 25%.

La presentación de la memoria tuvo lugar en la sede de la PIME de Formentera con la presencia de su presidenta, Jane Wenham, el director de la CAM en la isla, Vicent Rosselló y el delegado de la CAM en las Pitiüses, Vicent Prats en la primera ocasión que se pueden mostrar datos y encuestas desglosadas de ambas islas y que en el futuro serán una referencia vital para valorar el devenir económico de Formentera.

Si bien la situación no es tan pesimista como en Eivissa, el 43% de los empresarios piensa que 2009 será como 2008, si hay que resaltar que cuatro de cada cinco empresarios considera que el poder adquisitivo de los turistas ha bajado considerablemente en 2008; pero al mismo tiempo el 40,3% del empresariado confiesa que la calidad del producto que se ofrece a los visitantes es bajo.

Entre las diversas consideraciones y valoraciones que se recogen en la encuesta de la PIME de Formentera las tres peores notas que registran los servicios e infraestructuras de la isla son las barcas y los aviones en invierno así como los aparcamientos que se puntúan entre 2,6 y 3,5 sobre diez, mientras que los aspectos mejor valorados son justamente las barcas y los aviones en verano, con más de un siete de valoración, los autobuses en verano que alcanzan un 6,8 frente al 4,2 de invierno y la nueva normativa de los horarios de las discotecas que aprueba con un 6,6.