Los alumnos de los colegios de Sant Francesc de Formentera se vistieron de estrellas, soles y lunas con motivo del año de la Astronomía.

Bailarines de tango, pequeños soles amarillos, princesas, peces, caballitos de mar y guerreros medievales son algunos ejemplos de las opciones elegidas por los alumnos y profesores de muchos centros educativos de Eivissa que celebraron ayer sus particulares rúas y fiestas de Carnaval. Muchos colores y diferentes formas en el vestuario con un aspecto en común: la imaginación infantil y sobre todo el buen hacer en costura de muchos padres, madres, maestros y, por supuesto, niños. Y a la hora de hacer los disfraces, el protagonismo fue para las telas brillantes, los papeles de seda, las bolsas de basura, los cartones y todo aquel material al que se le pudiera dar un segundo y hasta un tercer uso, por ejemplo, garrafas de agua o cinturones de tela.

Los más pequeños fueron quienes quizá disfrutaron más de las actividades escolares. Alrededor de 50 niños de la guardería Educa de Jesús se disponían a abandonar ayer por la mañana su centro educativo para pasear sus creaciones por el pueblo. Unos optaron por vestirse de indios, otros de pintores y otros tantos más de cartas de póker. Eso sí, todos los trajes los hicieron en casa. Ya en la plaza del pueblo almorzaron y se reunieron con sus padres, quienes no pararon de hacer fotos a sus retoños. Los niños de la guardería Ditets se disfrazaron de los personajes y símbolos que identifican a sus grupos, por ejemplo, los soles, los bailarines y el grupo de los payasos. Durante la mañana de ayer disfrutaron de los juegos en el centro La isla de Robinson, donde celebraron una gran fiesta de carnaval en la que bailaron y cantaron temas tan conocidos como Veo, Veo y, además, jugaron durante toda la mañana. «Durante toda esta semana estamos haciendo la semana del carnaval. En todas las clases tenemos un rincón de carnaval donde hay telas, capas, disfraces enteros, sombreros y complementos que nos han traído los papás y mamás», explicó Amelia Torres, directora de esta guardería, quien puntualizó: «Hoy [por ayer] es un día un poquito diferente porque celebramos una gran fiesta de carnaval, pero ellos mantienen sus rutinas, por ejemplo, a la hora de ir al baño, comer o descansar».

Bellas princesas acompañadas por sus príncipes y otros seres encantados de los colegios S'Olivera y Puig d'en Valls desfilaron por el pueblo para mostrar a los vecinos sus creaciones. Los alumnos de Infantil y sexto curso de primaria de Sa Graduada, por su parte, representaron a su grupo en los trajes (por ejemplo, peces o caballitos de mar), mientras que los más mayores optaron por ser guerreros medievales acompañados por sus profesoras, vestidas de Reyes Magos. La asociación de padres y madres del colegio Portal Nou, por su parte, organizó una tarde de carnaval en el centro llena de música y color. Además hubo un concurso de disfraces para niños y mayores.

Astronomía en Formentera

Las escuelas de Sant Francesc eligieron la astronomía para montar su desfile de carnaval. La excepción vino dada por los alumnos de la escoleta del Consell Insular de Formentera que abrieron la marcha vestidos de marineros con sus cochecitos personalizados como barcos. Soles, estrellas, robots, lunas e incluso el cielo de ca Ses Monges o el colegio Mestre Lluís Andreu fueron desfilando en compañía de sus padres, quienes no acertaron tanto en los disfraces como sus hijos. Lo que no falló, eso nunca, fue el ardor familiar. Madres, padres, tíos, abuelos, hermanos mayores siguieron la cabalgata equipados con todo tipo de aparatos que inmortalizaban el momento. No importó que la rúa siguiera una ruta diferente a la habitual, como sucederá mañana, por la peatonalización de diversas calles del centro de Sant Francesc, el ambiente de alegría, fiesta y diversión estaba muy por encima de esos pequeños problemas.

María José Real

y Guillermo Romaní