1 Sa Coma, vía libre. Los acuerdos entre el Ministerio de Defensa y el Consell Insular sobre los terrenos de sa Coma permiten que, desde ayer, la institución pitiusa tenga una cesión temporal que deberá concretarse en una venta en los próximos meses. El president, Xico Tarrés, anunció en su mensaje de fin de año que abrirá un proceso negociador con los partidos para determinar los usos que se darán al hasta ahora cuartel. Entre estos figura la instalación de una depuradora, el circuito de motocross o aglutinar todos los servicios de emergencias comunes a la Isla.

2 La decisión sobre el puerto de Vila. Oficialmente no se ha cerrado el proceso de negociación entre PSOE y ExC respecto al puerto, pero la falta de avances y el apoyo de los socialistas al proyecto (con retoques) de la Autoritat Portuària, apuntan a un final próximo y a una licitación de las obras en el primer trimestre que permitirían los primeros trabajos durante el presente año. Eso si la asamblea de ExC, que tendrá lugar dentro de unos días, no obliga a un cambio de planes.

3 Obras millonarias en el aeropuerto. AENA acaba de licitar una ampliación del edificio terminal del aeropuerto cuyo coste estimado supera los 71 millones de euros. Hasta febrero se podrán presentar las ofertas y antes de final de año debería haber acabado el proceso de elección de empresa adjudicataria y el inicio de las obras, cuya duración será de 34 meses.

4 Carreteras de Sant Miquel y Sant Joan. El Consell d'Eivissa prevé comenzar este año las obras de las carreteras de Sant Joan y Sant Miquel antes de que finalice 2009, una inversión prevista dentro del acuerdo con el Ministerio de Fomento que permitirá contar con 55,4 millones de euros hasta el 2014 para inversiones viarias.

5 Se despeja el panorama urbanístico. Las normas subsidiarias de los distintos municipios tendrán su aprobación definitiva a lo largo de este año si no surgen retrasos en su tramitación. Santa Eulària, Eivissa y Sant Josep las aprobaron de forma inicial a lo largo de 2008 y todas se encuentran en fase de alegaciones. Por su parte, Sant Antoni aprobó un avance de su nueva normativa urbanística y, Sant Joan, que es el que más retraso lleva, es también el Ayuntamiento que está más cerca de concluir la tramitación de su nuevo planeamiento. Por ello el panorama urbanístico de la isla podría despejarse este año, al que igual que en Formentera, dado que también acaba de aprobar de forma inicial su nueva normativa.

6 Red única de agua desalada. Las inversiones para las desaladoras de Sant Antoni y Vila ya han sido aportadas por el Govern y las reparaciones de ambas infraestructuras están en marcha. Queda conocer si este año iniciarán las obras de la desaladora de Santa Eulària que será la que permitirá que una red única de agua para toda la isla sea un realidad.

7 Obra pública para fomentar el empleo. El pasado día 26 de diciembre, el Ministerio de Administraciones Públicas aprobaba los primeros cinco proyectos de un ayuntamiento pitiuso (Santa Eulària) para recibir subvenciones encaminadas a promover obra pública con el objetivo de fomentar el empleo. En conjunto, a Eivissa y Formentera deben llegar más de 20 millones en ayudas.

8 Primeras piedras para el Parador. El Parador Nacional de Dalt Vila comenzará a construirse este mes, concluyendo así años de tramitaciones para que este gran paraje sea una realidad. La primera piedra dará el punto de partida para una gran obra que tiene previsto concluir en 2011.

9 Nuevo hospital y decisión sobre radioterapia. Tras conseguir el mes pasado la cesión del solar para levantar el nuevo hospital de Can Misses, la tramitación administrativa sigue adelante para conseguir que las excavadoras se pongan manos a la obra lo antes posible. La nueva instalación contará con un búnquer para elementos radioactivos pero la Conselleria de Salut sigue sin pronunciarse abiertamente sobre si Eivissa tendrá o no una unidad de radioterapia.

10 Dispositivo antipateras. Tras la llegada a principios del año pasado de una patera con una decena de magrebíes llevó a Interior a anunciar la instalación de un radar fijo que controlará la llegada de inmigración irregular, así como el movimiento de embarcaciones con droga. Aunque se anunció para la segunda mitad del año pasado, la previsión para su instalación se ha retrasado para este año.