La alcaldesa, Lurdes Costa, y el concejal de Núcleo Histórico, Marc Costa, ayer, durante la rueda de prensa. Foto: MARCO TORRES

Dalt Vila cumplió ayer el noveno aniversario de su declaración como Patrimonio de la Humanidad y en el Ayuntamiento la alcaldesa Lurdes Costa lo celebró con un pronóstico de «viento a favor» en lo que se refiere a inversiones en el caso histórico.

Según Costa, el Govern aprobará hoy una «nueva fórmula para invertir siete millones de euros en el patrimonio de Eivissa» que se sumarán a los 14 millones que aportan a partes iguales entre el Ayuntamiento y el Consell, y que suponen «21 millones de euros para hacer nuevas inversiones en Dalt Vila y en la zona del casco histórico» en los próximos tres años. «Creo que es una buena noticia porque volvemos a tener una inyección económica que venimos reclamando desde hace cinco años», apuntó la alcaldesa.

El compromiso del Govern permite formalizar el crédito al Consorcio Eivissa Patrimonio de la Humanidad por un total de 21 millones ya que sin la firma de las tres instituciones no se podía conseguir este crédito y quedaba bloqueada la totalidad de la financiación.

La alcaldesa explicó que para poder cumplir con su parte de financiación el Govern ha tenido que crear una solución «que les obliga a aprobar cada año su aportación». «El Govern balear tiene ciertas limitaciones de endeudamiento y demás por lo que ha tenido que ha encontrar esta nueva fórmula. Está limitado porque aún está pagando el Palma Arena, las carreteras, y otros agujeros que algunos nos han dejado como herencia. Esto ha dificultado que no se pudieran hacer inversiones en patrimonio», explicó Costa, en referencia obras realizadas durante la pasada legislatura popular.

La alcaldesa aseguró que hasta ahora el Consorcio viene haciendo «milagros» por una falta de fondos que les ha obligado a «caminar a un ritmo más lento», sumado a «una cierta sequía en este primer año de legislatura». En este sentido remarcó que con el gobierno del PP en el Consell y en el Govern entre el 2003 y el 2007 fue un «lamentable espacio de tiempo en el que no se invirtió ni un euro en patrimonio», a diferencia, destacó, «de los primeros cuatro años (1999-2003) que fueron los más positivos porque fue la creación del Consorci y la primer inyección de 21 millones de euros que permitieron hacer las únicas actuaciones que se pudieron hacer».

Por otra parte, Costa recordó el compromiso del Ministerio de Cultura, que también forma parte del Consorcio, haciendo «aportaciones para proyectos concretos como en el Museu d'Art Contemporani (MACE). «Tenemos el compromiso del ministro de que seguirá habiendo pequeñas inyecciones a través del 1% cultural, por un lado, y también la promesa de hacer la biblioteca y de hacer el nuevo Museu Arqueològic que, aunque no estará dentro del casco histórico, será un espacio digno e importante», recordó.

Por último, la alcaldesa destacó «que los Reyes Magos vienen cargados este año», en referencia a la aportación del Fondo de Inversión Local que supondrá inyecciones económicas extraordinarias desde el Estado por más de siete millones en obra pública «para el resto de la ciudad».

La alcaldesa Lurdes Costa explicó que hay «muchas ideas» para el futuro de la casa de la Universitat, actual museo arqueológico, que quedará vacía una vez se construyan las nuevas instalaciones que se proyectan llevar a cabo con la financiación del Ministerio de Cultura. Entre las opciones que se está barajando, debido a que aún queda mucho para el futuro traslado, Costa señaló que la Casa de la Universitat sería un «buen espacio para explicar toda la historia de la época musulmana en adelante», es decir, la historia catalana tras la conquista. «Tenemos una historia tan rica que hace que tengamos muchos hallazgos arqueológico que se deben mostrar, pero pensamos que hay otras épocas históricas que también. Por eso, si ya se explica la historia musulmana en la Medina Yebissa, queda por explicar toda la historia de este siglo para adelante y la Casa de la Universitat sería un buen espacio para ello», destacó.