El Ayuntamiento de Sant Josep registró el año pasado unas 1.300 toneladas de residuos industriales vertidos en contenedores de residuos domésticos o en sus alrededores, cuya recogida supuso un coste de más de 100.000 euros para las arcas municipales.

Según el concejal de Obras y Servicios, Pere Ribas, es una práctica ilegal que se ha incrementado en los últimos años y que provoca «mala imagen para el municipio, y un perjuicio económico y ambiental que afecta al resto de los ciudadanos». Por ello, el Ayuntamiento prevé multas de entre 750 y 3.000 y en la actualidad ha iniciado cuatro expedientes de sanción, con el objetivo de hacer cumplir la ordenanza municipal de Gestión de Residuos Urbanos y Limpieza Pública.

«El ayuntamiento tiene la voluntad de hacer cumplir la ley y de sancionar a todos los infractores», apuntó el edil, quien destacó que Sant Josep tiene «el gran problema de que la gente tira dentro de los contenedores restos de poda y restos de obra», entre otros, por lo que el Consistorio comenzará «a controlar esta situación». «Los ciudadanos deben ser conscientes de que deben cumplir la ordenanza, de hacer todo lo que esté en sus manos para que nuestros municipio esté más limpio y más ordenado, y no lleno de residuos tirados por aquí y por allá», apuntó.

Por otra parte, desde el Consistorio indicaron que cuentan con la colaboración de la Policía Local «para todos los ciudadanos que quieran denunciar a aquellos infractores que tiren residuos sin respetar la ley».

El regidor de Obras y Servicios, Pere Ribas, y los responsables de Herbusa, Toni Ribas y Vicent Bufí, presentaron ayer una nueva campaña para concienciar a los ciudadanos con el objetivo de terminar con los vertidos incontrolados. La campaña consiste en la distribución de trípticos editados en castellano, catalán e inglés donde se facilita toda la información para la gestión de residuos y se indica dónde se deben depositar los diferentes tipos de deshechos o qué servicio de recogida existe para cada uno de ellos. Por otra parte, Herbusa también facilitó los datos de recogida en lo que va de año en Sant Josep, y que supone 20.500 toneladas de residuos urbanos entre enero y septiembre.