El GEN cree que la concesión de Ibiza Nueva se hizo para forzar la ampliación del puerto

El grupo ecologista ha anunciado en un comunicado que ha enviado un escrito a la Comisión Europea por considerar ilegal la concesión de explotación de los amarres de la ribera norte del Puerto de Ibiza.

Según los ecologistas, la concesión de dichos puntos de atraque se ha tramitado de forma irregular incumpliendo las directivas europeas.

El GEN ha denunciado que el contrato «que se ha tramitado como si fuese una contratación de servicios, esconde en realidad un contrato de obra pública por valor de 30 millones de euros».

Para los ecologistas este hecho se confirma en el mismo pliego de condiciones del contrato, donde se establece que la Autoridad Portuaria de Balears tendrá que dar su visto bueno a la empresa constructora que se haga cargo de la obra.

El GEN ha denunciado también que la empresa adjudicataria «ha estado relacionada con sociedades vinculadas al ex presidente de la Autoridad Portuaria Joan Verger».

Por otra parte, el grupo ecologista ha señalado que el concurso de adjudicación de los amarres ha estado «lleno de irregularidades» y que se resolvió «como medida de presión para intentar cortar el paso a las alternativas de remodelación del puerto que no fuesen la carísima e irracional propuestas de la Autoridad Portuaria, con el traslado del puerto a la zona de es Botafoc».

Los ecologistas han recordado que «la totalidad de las fuerzas políticas» han considerado como única «alternativa sensata» la eliminación del puerto deportivo de Ibiza Nueva.

La empresa Semar (Serveis Maritims Port d'Eivissa) es la nueva concesionaria del que hasta ahora se conocía copmo puerto deportivo Ibiza Nueva y que ha pasado a denominarse Marina Ibiza. El pasado mes de octubre comenzaron las obras de remodelación de este espacio que supondrá una reforma integral del puerto deportivo y que permitirá albergar barcos de hasta 55 metros de esolra.