Sagrario Cabrera vive hace 32 años en sa Penya. Como presidenta de la asociación de vecinos viene reclamando a las autoridades desde hace una semana que aumenten la seguridad en el barrio.

-¿Por qué reclama ahora más seguridad?

-Porque en verano, cuando hay más gente, estamos más seguros, pero en invierno estamos solos. Y si hemos ido a pedir seguridad lo hemos hecho con todo el respeto y con toda la confianza de que pedimos algo que nos corresponde.

-¿Cuál es el problema diario de sa Penya?

-Lo único que tenemos son enfermos; es como un ambulatorio, realmente.

-¿Se meten con los vecinos?

-A ver, aquí cuando vienen ya se sabe a lo que van. Lo que pasa es que no se sabe lo que puede pasar. En mi casa han entrado a robar tres veces por el balcón y, desde luego, no era ningún sano sanote; era un enfermo. No queremos vivir en un ambulatorio; queremos vivir en un casco antiguo digno.

-¿Está amenazada?

-No, a mí no me han amenazado nunca. Me han robado, me han cacheado, me han hecho de todo, pero amenazada, nunca.

-¿Y por qué no quiso dar su nombre?

-Porque no me pareció que tenía que dar ningún nombre porque no sé dónde estoy ni qué puede pasar. Además, yo no hablo por mí, porque no tengo ese problema, vivo en la mejor zona del barrio. El problema lo tienen otros, y hablo por ellos: hablo en nombre de los que tienen propiedades que no pueden ocupar porque se las han destrozado. Además, nosotros no tenemos por qué hablar cuando todo el Ayuntamiento y toda la policía sabe lo que hay. ¿Qué le vamos a contar a las autoridades que no sepan? Somos vecinos, pero no somos chivatos.

-Durante esta semana tampoco quisieron nombrar a la asociación de vecinos, pero hicieron declaraciones en nombre de un grupo de vecinos del casco antiguo, algo que no gustó en los otros barrios que componen esta zona.

-Mira, nuestra vida no es cómoda ni segura, y cuando vives entre esta gente mejor es que no se sepa quién habla, por eso nunca queremos dar nuestro nombre. Cuando salió este artículo hablamos de casco antiguo, no dijimos tres barrios, y si dijimos casco antiguo fue para que no haya ninguna molestia, porque a lo mejor la molestia no es una amenaza, pero es que te cagan todos los días en la puerta de tu casa. Dijimos casco antiguo pero sin querer englobar a los demás, porque tenemos más de cien años de antigüedad y eso nos da derecho suficiente a llamarnos casco antiguo. Lo que nos parece vergonzoso es que en la Marina, donde más cámaras de seguridad hay, digan que no hay inseguridad porque para eso hay que preguntarle al comercio a ver cuánto le roban. ¿Y para qué hay tantas cámaras en la Marina si no hay inseguridad? ¿Por estética? Si se sienten seguros, pues me alegro por ellos, que no les pongan cámaras, que las pongan en sa Penya, que aquí no hay ninguna.

-¿Os hace falta apoyo?

-No es necesitar apoyo o no, no necesitamos firmas. Somos lo suficientemente autóctonos y autónomos y valientes como para defendernos, pero la realidad es que hace falta vigilancia, que es lo que pedimos.

-¿Cómo está el barrio?

Está más abandonado, vive menos gente. Es incómodo vivir aquí, tienes una incomodidad básica porque son calles peatonales y no llegas ni con el coche para traer la compra. Y si encima llegas un día y te encuentras una porquería y otro día otra porquería... ¿Por qué crees que no vive nadie?, porque bonito es y silencioso también. Es como un paraíso dentro de la ciudad, ¿y porque un paraíso dentro de la ciudad está abandonado? Por falta de higiene y seguridad.

-Ahora hay una concejalía de Núcleo Histórico....

-Sí, es la suerte que hay, tener un concejal que se ocupa del barrio y que intenta hacer todo lo que puede. Lleva un control de día a día y es un señor que se merece un respeto y un apoyo por parte municipal, estatal y periodística.