Un juez de la República Dominicana ordenó éste jueves que se curse una orden internacional de detención contra Abel Matutes Prats y su tío Antonio Matutes después de que no comparecieran a la vista que se celebraba en el país centroamericano por la denuncia de una asociación de vecinos por la presunta construcción sin licencia de un bloque de 31 alturas en la capital, Santo Domingo.

El Grupo de Empresas Matutes (GEM) emitió ayer un comunicado en el que defendió la decisión de sus directivos de no asistir y aseguraron que la demanda «es un montaje por el cual unos cuantos señores pretenden llevar a cabo un chantaje manipulando la buena voluntad de unos vecinos». La indemnización solicitada equivale a 4,45 millones de euros.

Según publicaron ayer los medios dominicanos, la declaración en rebeldía de los empresarios ibicencos llegó después de que la abogada de la acusación pidiera por tercera vez el arresto para garantizar que responden ante el magistrado de las acusaciones.

Explicaciones

Por su parte, desde las Empresas Matutes se defendió la no asistencia debido a que no se les notificó de forma adecuada y con el plazo legal exigible la necesidad de comparecer. Además, añaden que existe un procedimiento previo de tipo contencioso-administrativo pendiente de sentencia que es el que debe aclarar su responsabilidad. Hasta que no esté dicha resolución, explicaron desde GEM, no se acudirá a la vista de la vía penal, trasladada al próximo martes.

Respecto a su vinculación a la presunta ilegalidad, los Matutes defienden su inocencia y aseguran que la obra cuenta con el visto bueno del Ayuntamiento. A renglón seguido, añaden que sus empresas Adecu Business y Promociones y Proyectos contrataron con la firma Ciccarcht las obras 'llave en mano', por lo que ésta empresa debía gestionar todos los permisos y, por lo tanto, de existir alguna irregularidad debe imputársele a ella.