El líder del PP en el Consell, Pere Palau, calificó ayer de «miseria» el dinero que aportará el Govern a la isla de Eivissa en los presupuestos de 2009. Según la propia documentación que figura en los presupuestos, Eivissa recibirá 83 millones de euros, aunque faltan por sumar los gastos en salud y otras cifras de las que todavía no dispone la Conselleria d'Hisenda, según remarcaron fuentes de este departamento.

Palau consideró que 83 millones son pocos porque una «obrita pequeña en Mallorca» ya tiene un presupuesto «muy superior». «Siempre hablan de esos dineros de Madrid, de la mejora de la financiación a través del nuevo Estatut, pero está por ver y yo espero que esto mejore de alguna forma», confió Palau, que recordó que en la isla hay paralizadas muchas obras desde hace tiempo y enumeró la ronda sur de Sant Antoni, la segunda fase del paseo de Cala Gració o la segunda fase del palacio de congresos de Santa Eulária. «Hay muy buenas palabras y vienen a descubrir placas del trabajo que ya hicimos nosotros, pero no se comprometen a seguir invirtiendo», denunció Palau, que recordó también las mínimas inversiones en transporte público del Govern. «Esto no lo digo yo, lo dice el equipo de gobierno del Consell», añadió el popular, que cree que tampoco están claras inversiones muy necesarias como depuradoras o nuevos equipamientos educativos.

«También hablan de que se gastarán dinero en la auditoría, ya ves que gran obra, y en las expropiaciones, que ya tendrían que estar previstas», añadió Palau, que fue muy gráfico y aseguró que en Mallorca nos han dejado «con el culo al aire».

«Desde que gobierna el Pacte vivimos una política de grandes hechos en los medios pero llevamos un año y medio y ya tendríamos que tener proyectos y obras en marcha», criticó el líder del PP, que indicó que «los gobiernos amigos de Mallorca y Madrid» en vez de hacer más caso a Eivissa «nos perjudican». «Apelaría a la responsabilidad política del grupo que gobierna y que da apoyo al Govern, porque no basta con hacer declaraciones en los medios de que no estamos conformes, sino que hay que ir a Mallorca, sentarse con el presiente del Govern y exigirle lo que merecen los ciudadanos de Eivissa; yo lo hice y Antonio Marí Calbet también», concluyó.