Las familias con menores de tres años que no tienen a sus hijos escolarizados cuentan a partir de mañana con el servicio «Espai Familiar» que cada miércoles, de 17 a 19 horas, se ofrecerá en la escoleta de ses Païsses, en Sant Antoni, aunque la intención es extender este recurso gratuito al resto de los centros de la red pública y también a los privados. El conseller de Politica Educativa, Marià Torres, la delegada insular d'Educació, Margalida Marí, y la responsable en Eivissa del Plan de Primera Infancia, Magdalena Merino, presentaron ayer esta actividad denominada «Espai Familiar» que se celebra por primera vez en Eivissa. «Ofrecemos a las familias de Eivissa que no han tenido una plaza en las escoletas una serie de actividades en un espacio en el que participen niños y familias, no es un taller para niños sino interesa que este espacio lo compartan familias conjuntamente con sus hijos», explicó ayer Marià Torres, aunque pueden inscribirse niños escolarizados en otros centros.

El conseller subrayó que con esta oferta educativa se trata de de que «las familias aprendan actividades y que tengan un espacio de comunicación entre ellas y los profesionales de educación infantil para consultar y compartir todas aquellas dudas, necesidades, problemas y experiencias que viven en las familias».

Las familias interesadas en participar pueden dirigirse a la escoleta de ses Païsses para formalizar su matrícula. Torres subrayó que esta iniciativa «es una deuda de las instituciones educativas con la sociedad, ya que no se trata de ofrecer una plaza escolar sino mejorar el mundo educativo». También comentó que esta iniciativa «puede ser una buena ayuda a estos 225 niños que se han quedado sin plaza en las escoletes del Consell». Merino señaló que este servicio «ha tenido un buen resultado» en los lugares en los que se ha puesto en marcha. «Se trata de que las familias que por los motivos que sean no lleven sus hijos a la escuela infantil que se encuentren que tienen un espacio para ellos; que se sienten que tienen respuesta en un espacio de encuentro y para compartir», comentó Merino. Señaló que se ha elegido una escuela infantil al ser los lugares más adecuados y en condiciones mejores para acoger a los niños, que cuentan con profesionales para acompañar a las familias. De momento empezará con un grupo con un máximo de 12 familias. Los grupos se ampliarán si hay más oferta.

La delegada insular d'Educació, Margalida Marí, recordó que esta actividad se incluye en el Plan de Primera Infancia y espera que el Espai «sea el primera de muchos que se pondrán en funcionamiento». «Nuestra sociedad es cada vez más sensible a las necesidades de los más pequeños y traspasa un poco esta necesidad el ambito educativo tradicional y por eso se ha de avanzar a nuevos servicios que respondan a las necesidades que tienen los niños», añadió. E su opinión «es fundamental la colaboración entre familias, centros educativos y administración».