El Piscis Park es la más importante de las incorporaciones. Foto: MARCO TORRES

Ni las vacas flacas de la economía ni las constantes denuncias sindicales o los dos procesos judiciales abiertos contra él han impedido que el empresario catalán Fernando Ferré siga adelante con su expansión.

El Grupo Playa Sol (GPS), matriz de un entramado empresarial que UGT y CCOO han denunciado en numerosas ocasiones por estar destinado a fomentar la opacidad de las actuaciones presuntamente irregulares de Ferré, ha alquilado por 15 años los hoteles Piscis Park y Don Quijote, situados en la bahía de Sant Antoni y Ses Figueretes, respectivamente.

Fuentes de la empresa confirmaron que han llegado a un acuerdo con los herederos del anterior propietario, Xavier Cabau (empresario que también se vio envuelto en polémicas y procesos judiciales) «para hacernos con la comercialización y explotación» de ambos hoteles, cerrados en estos momentos tras acabar la temporada y que volverán a abrir en mayo con la enseña de Ferré en sus fachadas.

Desde la empresa se asegura que «se ha crecido y se espera seguir haciéndolo gracias al apoyo de los touroperadores y clientes» a un ritmo «que quizás se frene algo al tener pendientes muchos pagos y puede que no alcance el 20% anual de media que se ha conseguido desde 2002».

1.400 plazas más

La incorporación de los dos centros supone que GPS incorpore unas 1.400 plazas más a la planta hotelera que gestiona. Desde el grupo se apuntó ayer que el hotel de Sant Antoni cuenta con 366 habitaciones, lo que implica unas 1.100 plazas, mientras que el Don Quijote tiene 106 unidades, o lo que es lo mismo, 300 plazas.

«Con esta actuación tenemos 60 hoteles en las Islas y nos sitúa como segunda o tercera cadena por capacidad en Balears detrás de Sol Melià y en competencia con Grupotel», aseguraron las mismas fuentes, aunque no precisaron el total de plazas controladas por Ferré. Según estimaciones aparecidas en los medios el pasado año, Ferré controlaba entonces más de 14.000 plazas hoteleras.

La planta hotelera se encuentra en su totalidad en la isla de Eivissa, a excepción de un establecimiento de tres estrellas en Palma, y se centra en los hoteles del segmento medio bajo, hostales y apartahoteles. De hecho, los dos centros incorporados son de dos estrellas «en los que tenemos previsto hacer actuaciones, quizás no en 2009 por la situación económica, entre las que figura dotarlos de aire acondicionado».

Respecto a las plantillas respectivas, desde GPS se aseguró que su intención es mantener los puestos de trabajo de los fijos discontinuos con que contaban los establecimientos la pasada temporada.