Hace solamente unos pocos meses yo, y creo que muy pocos de vosotros/as, no os hubierais imaginado que el caso de Rodrigo de Santos pasaría tan pronto a un segundo plano. Pero hoy, los 50 mil euros vuestros y míos que se gastó Rodrigo para sus devaneos sexuales con chicos suena a lejano. Los acontecimientos se han precipitado de tal manera que nuestra mente está ya ejercitada para digerir el nuevo escándalo del día, y prepararse para el de mañana. Yo ya no encuentro adjetivos para describir lo que estamos viviendo, por lo que me limito a decir que siento asco de todos esos políticos y adláteres que durante años nos han estado masacrando (presuntamente) con Matas (Jaume) a la cabeza del Govern. Lo último son las comparecencias judiciales por los casos de Son Oms y el CDEIB.

Vicens se arrincona en su escaño y dice que no dimite ni a ostias. Cuando sale de declarar del juzgado utiliza la táctica de decirnos que ya no está acusado de cohecho ni de tráfico de influencias, cuando en realidad no lo estaba, y no se descarta que lo esté. La Fiscalía Anticorrupción «sólo» le acusa de estafa, blanqueo de capitales, falsedad y un delito contra la Hacienda Pública. Un gran triunfo para Vicens. Una nimiez en los tiempos que corremos. Algo sin importancia para un personaje que ocupa un escaño en el Parlament y que tiene que velar por los intereses de los ciudadanos/as de Balears. Claro que siempre puede decir que con su experiencia (presunta) está mejor preparado para defendernos de estafadores, blanqueadores y defraudadores. Sus defensores en el partido, que los tiene (a saber por qué), se encargan de ir pregonando por ahí que cuando cometió los delitos de que se le acusa no ocupaba ningún cargo en el partido. Está claro que es inocente hasta que se demuestre lo contrario, pero creo que habría que tener en cuenta la alarma social que ha creado su caso.

¿Y de Cardona, qué deciros?. Para no ser menos que los protagonistas de los anteriores escándalos políticos, Cardona se suma a la lista de frases y actitudes ya célebres con una momentánea perdida de memoria. Ahora que se ha levantado el secreto de sumario se sabe que cuando acudió a declarar en el juzgado se le preguntó por las firmas que había estampado en las adjudicaciones de contratos, y por decisiones que se habían adoptado en su conselleria. Cardona dijo que se fiaba de su equipo y que a veces firmaba sin leer el contenido del documento. Entonces se le preguntó si él eligió a su equipo y contestó que no. Nueva pregunta: «¿Fue suya la decisión de nombrar a Antonia Ordinas como gerente del CDEIB?». La respuesta fue negativa y de inmediato la pertinente pregunta: «¿De quièn fue entonces?». Y Cardona, que sólo dos semanas antes había declarado en los pasillos del Parlament que fue Matas (Jaume), el que le dijo que colocara en el cargo a la cultivadora de coles, tomates y cajas de Cola Cao, sufrió otra repentina perdida de memoria y su respuesta fue un «no lo recuerdo». Yo le doy un consejo gratis, que tome alimentos que tengan mucho fósforo, porque dicen los que entienden que son buenos para la memoria. Abstenerse, es obvio, de comer cerillas.

También se le preguntó sobre la procedencia de una importante cantidad de dinero (unos 150 mil euros), y dijo que los guardaba en su casa de Eivissa y que el dinero se lo dieron sus hermanos por un asunto de herencia. Por lo menos este diputado no invirtió en Repsol, quizás porque no se fía de nadie y prefiere tener los euros en casa o bajo las coles, como la que era su gerente, no sea cosa que le pase como a Vicens. ¡Magnifico!, en un gobierno donde había tanta corrupción (presunta) es hasta lógico que se pensara que los ciudadanos/as de estas Islas somos idiotas y nos lo creemos todo. Acabo de ver a tres asnos volando y no son ni Cardona, ni Vicens ni Matas (Jaume), que conste.

La noche antes de la declaración en el juzgado se le vió a Cardona paseando solo por el centro de Palma. Parecía un alma en pena, pensativo, meditabundo, quizás acongojado podéis pensar algunos/as. Pero cuando a la tarde del día siguiente salió del juzgado «solo» como imputado por prevaricación su sonrisa no tenía límites. Para algunos de sus compañeros de partido había triunfado. El señor diputado regresó al Parlament más contento que unas pascuas. Cuentan que en el salón de las Cariátides recibió abrazos y felicitaciones de algunos compañeros de partido, y que una vez sentado en su escaño dejó el móvil con sonido. Así, las cuatro o cinco veces que le llamaron se levantó sonriente y salió al pasillo. Daba a entender al resto de diputados/as que recibía más llamadas de apoyo. Lo dicho, todo un héroe. Sin memoria, pero bueno...

La que ha dicho estos días otra frase célebre ha sido Rosa Estarás, presidenta del PP en Balears. El mismo miércoles, al saber que Cardona había salido por su propio pie de los juzgados declaró que «ha pasado lo que tenía que pasar. Una señora sin credibilidad (Ordinas) le acusó, y él ha ido a defender su honorabilidad». Creo que es la primera vez que alguien importante del partido reconoce que en el anterior Govern había cargos que no tenían credibilidad. Porque Ordinas fue gerente del CDEIB y antes, en 1994, dicen que también por deseo de Matas (Jaume), ocupó otro cargo de confiaza en el CDER. O sea que en el fondo, y aunque quizás no fuera esa su intención, Rosa Estarás dio un primer paso para contarnos como se comportaban algunos/as en el anterior Govern.

Y mientras todo eso ocurre Matas (Jaume), que era el jefe político de toda una manada de corruptos (presuntos), vive su retiro dorado en Washington. Lo triste es que en el PP hay mucha gente buena, entre tantos miles de militantes, que no se merece pasar por esta situación. Pero, para empezar, si se quiere cambiar hay que empezar por la cabeza. Y está claro que la actual cabeza del partido es Estarás (la de Madrid es el coñazo de Rajoy). Lo digo por una simple deducción lógica. Si hay quien dice en el mismo partido que Matas es un cadáver político, no es muy coherente que digamos que la persona que rige los destinos del partido sea la que quería Matas (Jaume) que lo hiciera.

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