omienza el curso escolar y con ello las iniciativas «para hacer que los estudiantes más jóvenes vean el colegio como un lugar donde también se pueden divertir a la vez que aprender», con estas palabras explicó Juani Sastre, presidenta de la Asociación de Padres y Madres del colegio público Can Misses, el objetivo del taller de manualidades sobre Halloween que se celebró ayer en colegio Can Misses de Vila. Una de estas propuestas es hacer en varias ocasiones al año talleres en la biblioteca del centro.

«Los padres vienen con su hijos, los niños hacen manualidades y también los padres sacan un poco de tiempo para jugar con ellos», explicó Juani Sastre acerca del objetivo del taller. Más de cincuenta alumnos desde tres años de edad hasta los diez dedicaron la mañana de ayer a elaborar calabazas, fantasmas, murciélagos y todo motivo relacionado con la fiesta anglosajona Halloween.

Fueron capaces de crear con sus propias manos, y en algunos casos con necesidad de algo de ayuda adulta, móviles de cartulina, elementos de decoración con forma de fantasma con purpurina o marcadores para los libros, porque la idea de hacer estos talleres de manualidades es también que los niños y los padres puedan adquirir libros o incluso leer algo allí mismo. «Tenemos un buen fondo de libros y revistas para adultos además de los libros infantiles y si los niños ven leer a los padres toman ejemplo y ya no lo ven como una obligación», añadió Juani Sastre. Hubo niños que estuvieron ojeando libros acompañados de sus padres y algunos de ellos también optaron por llevarse algún libro a casa para que los pequeños dediquen algo del fin de semana a la lectura. El aprendizaje estuvo entre libros y calabazas. N. Salazar

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