C.A/L. A.

Los padres exigieron ayer una revisión integral del colegio Vara de Rey de Sant Antoni antes de llevar sus hijos al colegio para que les garanticen que se encuentra en buenas condiciones de seguridad tras el derrumbe del falso techo de dos aulas. Los padres temen que, dado el estado de las vigas descubierta a raíz del desplome, el resto del edificio también tenga problemas que afecte a la estructura. De momento han decidido que el lunes irán al colegio pero los niños no entrarán en las aulas.

Unas 200 personas, entre padres y niños del colegio, 'tomaron' ayer el Ayuntamiento de Sant Antoni pidiendo la colaboración municipal. En un encuentro, que se prolongó durante una hora, el alcalde accidental, Joan Pantaleoni, se comprometió a mediar ante la Conselleria d'Educació para que realice un informe exhaustivo del estado del centro garantizando la seguridad del centro. «Nos hemos comprometido a ser intermediarios con la Conselleria d'Educació. Los padres piden la revisión de todo el colegio, que no ocurra lo mismo en otra aula porque sabemos que hay un falso techo que puede ocultar otras deficiencias», dijo el alcalde accidental. Pantaleoni comparte la preocupación de los padres y se comprometió a hacer la gestión. «Queremos soluciones urgentes ya», dijeron los padres reunidos con el alcalde accidental en el salón de plenos. «No estamos dispuestos a que vayan al colegio en la situación en la que se encuentra», añadió. Aseguran que el desplome del falso techo ha dejado al descubierto unas vigas que sustenta la estructura está en mal estado y hay grietas por la parte trasera del colegio. Los niños portaban carteles reclamando un colegio nuevo.

El alcalde leyó el informe municipal realizado tras el desprendimiento en el que recoge que el motivo del derrumbe es por la filtración de los baños contiguos y que los daños son puntuales. El informe desvela que una vez realizadas las reparaciones se puede reanudar la actividad escolar.

Ante el estado del edificio, Pantaleoni, que aclaró a los padres que el Ayuntamiento sólo se encarga del mantenimiento no de construir centros, es partidario de que se construya un colegio nuevo antes de una reforma. También aconsejó a los padres que fueran a hablar con la Conselleria d'Educació aunque ellos afirmaron que lo hicieron un día antes y aseguraron que «no les dijeron nada».

Evaluación estructural

Por la tarde, el alcalde accidental Joan Pantaleoni, informó que las peticiones de los padres, tanto la que hace referencia a la revisión estructural del edificio como a la que hace referencia a los baños del colegio Cervantes. En este sentido, aparejadores del Ibisec y del Ayuntamiento realizarán la revisión hoy mismo para comprobar que las instalaciones están en condiciones.

Por su parte, la delegada de Educación, Margalida Marí, señaló que el informe municipal que indica que son daños puntuales «es tranquilizador», un mensaje que quiso trasladar a los padres ya que ayer el ausentismo fue de más de un centenar de niños de primaria, casi la mitad de los alumnos del colegio Vara de Rey que suman un total de 236.

Los baños para las aulas prefabricadas del Cervantes destinadas a infantil es otra de las reivindicaciones de los padres ya que los niños han de ir por una zona descubierta hasta llegar a los aseos. «Se han de hacer. Hemos ofrecido colaborar con Educació en la red de saneamiento de los baños», dijo Pantaleoni. Este no es el único problema ya que sacar los niños al patio los profesores han pedido la colaboración de las madres ya que está fuera del recinto. Antes del derrumbe, Educació tenía previsto trasladar a los niños en enero a las aulas del Cervantes y ses Païses para poder acometer la reforma.

Horas después de la protesta de los padres, Pantaleoni señaló que el problema de los asesos para los más pequeños tendrá pronta solución ya que técnicos del Govern y del Ayuntamiento se han puesto a trabajar de forma conjunta para concretar la conexión con la red de pluviales y la instalación de la estructura de los baños. «Tardará pocos días, está bien encaminado», apuntó.