C.ALCÀNTARA/L. AVERSA

La Asociación de Padres y Madres de Alumnos (Apyma) del C.P. Vara de Rey se manifestará hoy con sus hijos ante el Ayuntamiento de Sant Antoni para pedir «garantías de seguridad» del estado del edificio, después de que el pasado martes, fuera de horario escolar, se derrumbara un falso techo provocando el desalojo de los cursos de segundo y tercero de primaria, ubicados debajo y arriba de esta estructura.

«Queremos que nos den garantías de seguridad para nuestros hijos en el colegio y que nos aseguren también que se van a hacer las reformas y que van a mirar que en el colegio todo está en buen estado», apuntó Nuria Medina, vicepresidenta de la asociación, para quien el hecho de que el desprendimiento haya tenido lugar en el sector del colegio en el que no se prevén obras de reforma es preocupante «porque es la estructura que se da por buena y es insegura». «Si se ha caído un trozo quién sabe si dentro de cuatro días se va a caer más o va a pasar algo peor», apuntó.

Por su parte, la delegada de Eduación, Margalida Marí, explicó que el desplome del falso techo no era algo previsible aunque reconoció que «el edificio necesita una intervención rápida y urgente». «En ningún momento pensamos que eso podía pasar», señaló la delegada, quien explicó que hasta ayer los técnicos municipales y del Ibisec continuaban haciendo catas y revisiones del edificio, cuyo estado se podría conocer hoy mediante un informe.

Por otra parte, Marí señaló que el derrumbe provocó el traslado de los alumnos de infantil a las aulas prefabricadas del colegio Cervantes, una reubicación que estaba prevista para Navidades, cuando se comenzara con las obras en el colegio de las aulas dedicadas a los más pequeños y de las antiguas viviendas de los profesores, que deberán ser derrumbadas por su mal estado.

Asimismo, los alumnos de primaria desalojados han sido reubicados en las aulas de infantil, aunque fueron muchos de los padres que siguieron el consejo de la dirección del centro y no llevaron a sus hijos a clase estos últimos días.

Desde la delegación estudian ahora también adelantar el traslado de primaria a las aulas prefabricadas de ses Païsses, cuya instalación está pendiente de la retirada de un palo de luz por parte del Ayuntamiento que, según Marí, «será inminente».

La consellera balear de Educació, Bàrbara Galmés, aseguró ayer que «no hay peligro en el resto del edificio. La consellerá apuntó también que está al tanto de las condiciones de las aulas prefabricadas del colegio Cervantes, que levantaron quejas entre los padres de alumnos. «Contamos con un informe de todas las deficiencias y son subsanables», aseguró Galmés.