La Policía Local de Sant Josep precintó ayer por la tarde la discoteca DC10, situada en la carretera de Sant Jordi a ses Salines y que tenía previsto celebrar ayer la última fiesta de la temporada.
La fiesta debía comenzar a las 16.30 horas pero la Policía Local, según fuentes municipales, se personó en el lugar para comunicar a la propiedad la orden de cierre.
Las mismas fuentes indicaron que tras el cierre de la temporada la discoteca Space ayer se esperaba una gran afluencia en la fiesta de despedida de DC10. De hecho, a las 17.30 horas decenas de coches se encontraban en el aparcamiento de las discoteca a pesar de que ésta se encontraba precintada.
El cierre de la discoteca se produce después de que el Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 2 de Palma haya aceptado el expediente sancionador que el ayuntamiento cerró el pasado 12 de septiembre y por el que impuso una sanción de 300.000 euros y el cierre del establecimiento por un año.
Este expediente se comenzó a tramitar en verano de 2007 «por un exceso de aforo y la realización de una actividad no permitida», según el texto del mismo.
Los propietarios del local presentaron un recurso solicitando la suspensión de ejecución de la orden de cierre, que el juzgado ha denegado ahora.
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