JUAN MESTRE/TORRES BLASCO

El Consell Polític de Unió Mallorquina acordó ayer de forma unánime que sea la ejecutiva la que decida si Francesc Buils sigue como conseller de Turisme en el Govern de Antich. La reunión del Consell Politic sirvió para que Buils rectificase, pidiese disculpas por el órdago protagonizado estos días, y en un momento de la reunión anunció que dimitía, pero segundos después rectificó y dijo que dejaba el cargo a disposición de UM.

La ejecutiva de Nadal se reunirá el martes y decidirá si Buils continúa o no. En estos momentos, la mayor parte de los integrantes de la ejecutiva son partidarios de pedirle a Antich que destituya a Buils como conseller. Tampoco se descarta que sea el propio Buils el que dimita antes de que la ejecutiva se reúna el martes. Sólo unos pocos miembros de la ejecutiva respaldan ahora mismo a Buils, pero las cosas pueden cambiar.

Nadal compareció sonriente ante los medios de comunicación tras ganar claramente el Consell Polític y marcar una nueva etapa en UM. «Me siento muy apoyado en UM. Tengo un partido más unido y más fuerte, con una dirección que tiene las ideas claras», aseguraba un Nadal que había ganado el pulso interno. Ese era su objetivo. «Es un día histórico para UM», reconocía Catalina Julve, portavoz de las filas nacionalistas.

Actitud de Buils

El presidente de UM valoraba de manera positiva «la actitud de Buils» al aceptar que se había equivocado. Para Nadal, la postura del todavía conseller de Turisme «le honra». Nadal no dejaba de repetir que se sentía fuerte y respaldado. De hecho, algunas de las personas próximas al presidente de UM desconocían exactamente el equilibrio de fuerzas interno. Nadal creía que podría ganar la votación en el Consell Polític pero no sabía qué influencia tendrían todavía algunas de las personas próximas a la ex presidenta.

En la reunión del Consell Polític, la postura de Grimalt en favor de Nadal fue clave. El conseller de Medi Ambient se ha situado claramente al lado del president de UM pese a que antes del congreso apenas sintonizaban políticamente.

Miquel Nadal y Maria Antònia Munar protagonizaron ante los miembros del Consell Polític de UM un claro enfrentamiento. Cuando Munar pidió que se respetasen los acuerdos adoptados por la mañana, Miquel Angel Grimalt, vicepresidente de UM, pidió a la presidenta de honor que dejase al nuevo equipo dirigir la ejecutiva «sin tutelas». El Consell Polític fue tenso y en un momento de la reunión Nadal le dijo a Munar: «Si quieres dirigir el debate te colocas en mi sitio».

Munar se sentó junto a Buils. Mientras intervenía, algunos integrantes del Consell Polític la rectificaron.