El barrio de sa Penya tendrá en poco más de un año una nueva plaza en sa Pedrera y un centro artesanal que costará casi un millón de euros y que cuenta con una importante financiación de fondos europeos y de la Conselleria balear de Comerç.
Según destacó la alcaldesa de Eivissa, Lurdes Costa, se trata de un edificio que contará con una perspectiva más amplia, de centro polivalente, para «reactivar socialmente y económicamente el barrio de sa Penya» y transformarlo de «forma gradual».
La intervención se hará a pie de muralla, en la zona más alta del barrio de sa Penya y conectará directamente con la calle que desemboca en sa Peixeteria, que también cuenta con un proyecto de remodelación.
Será un edificio semisoterrado que quedará «discreto e integrado en el paisaje». El centro artesanal y polivalente tendrá una superficie de 890 metros cuadrados y la plaza superior contará con 1.100. El proyecto es obra del arquitecto Raimon Torres, que conoce perfectamente la zona por haber sido miembro del equipo redactor del Plan especial de protección y reforma interior (Pepri) del casco antiguo.
La alcaldesa de Vila firmó ayer el convenio mediante el cual consigue un 50% de financiación de fondos Feder y otro 25% de la Conselleria de Comerç, con la responsable de este departamento, Francesca Vives. De esta forma, el consorcio Eivissa Patrimoni de la Humanitat sólo tiene que aportar el 25% restante.
Las obras podrán sacarse a concurso de inmediato, por lo que el concejal de Vivienda y Núcleo Histórico, Marc Costa, confía en que puedan estar acabadas el año que viene, ya que el plazo de ejecución es de doce meses.
Costa explicó que el proyecto forma parte de una iniciativa más amplia que prevé también la rehabilitación de la casa Bronner y otros edificios que se situarán en la plaza. De hecho, se proyecta también un centro cívico encima del artesanal y tres viviendas de VPO. Estos edificios no cuentan con la financiación de fondos Feder, aunque también están muy avanzados. Las tres viviendas de protección oficial están a punto de salir a concurso y lo que tardará más es el centro cívico, en el que «ya se está trabajando». «Con todo esto se dará una solución a parte del barrio de sa Penya», explicó Costa, que destacó que a esta zona se puede acceder desde sa Peixeteria, que también será remodelada, a través de una calle que bordea la muralla.
Vertiente social
La consellera de Comerç destacó la gran importancia de este proyecto también por su vertiente social y recordó que hay otra iniciativa de Eivissa que gozará de estos fondos, que es la adquisición de la parcela de sa Capelleta, donde hay importantes restos arqueológicos y donde en un futuro se desarrollará un proyecto museístico.
El concejal de Núcleo Histórico explicó que este año se ha culminado la expropiación de algunas casas de esta zona, que se han tirado y que han permitido tener más espacio para la plaza de sa Pedrera. De hecho, ya se está procediendo a una primera fase de vaciado de tierra. Costa destacó que siempre intentan conseguir ayudas para estos proyectos porque «la rehabilitación de un barrio degaradado requiere mucha constancia».
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