La Federación Empresarial Hotelera de Eivissa y Formentera (Fehif) uso ayer palabras muy duras para referirse a la propuesta de la Conselleria de Turisme del Govern para legalizar plazas turísticas a cambio del pago de una tasa de dos tramos a partir de 4.300 euros por habitación y que ha sido acordado con su homóloga de Mallorca. «Consideramos que legalizar plazas turísticas a cambio de dinero supone una estafa a quienes hemos cumplido la ley. Es un agravio que nos indigna», recoge la nota hecha pública ayer por los empresarios.

El documento añade que «no tiene sentido presumir de calidad cuando al mismo tiempo se abre la puerta a la legalización de aberraciones que sólo podrían cometer empresarios indeseables» y auguran que la aplicación de este modelo «producirá una espiral de devaluación del producto, precios más bajos, mal servicio, puestos de trabajo precarios», una situación «que no queremos en Eivissa», defienden.

Los empresarios aseguran que con la crisis actual «introducir plazas de mala calidad» acabará «reventando el mercado» y defienden que «en ningún caso se deben legalizar aumentos de capacidad por encima de un 5% sobre la que legalmente se tenga».

En este sentido, la Fehif critica que el borrador que se les ha presentado «cosiste en legalizar cualquier situación, sin atender a ningún otro criterio ni limitación».

El conseller de Turisme, Francesc Buils, defendió ayer en Eivissa el acuerdo alcanzado con los hoteleros mallorquines y que ha culminado un año de trabajo de los técnicos de su departamento.

«Ante este problema teníamos la opción de obviar el tema, perseguir oficialmente las irregularidades a través de nuestros inspectores o dar una solución que permita el control de cuáles y cuántas habitaciones hay», aseguró Buils, quien destacó que el acuerdo hasta ahora firmado «supone generar unos recursos para infraestructuras de unos 80 millones, lo que es entre tres y cuatro veces lo generado por la ecotasa».

El conseller reiteró que se trata de un acuerdo «que patronales y sindicatos de Mallorca consideran positivo» aunque concedió que «es evidente que cada isla es competente en poner en marcha o no la propuesta». «Lo que hemos hecho es poner a disposición de los Consells el trabajo realizado por los técnicos para su discusión con las federaciones y, quizás, la situación aquí sea otra y estemos hablando de situaciones muy específicas de la planta hotelera de Eivissa», concluyó.