Prostitutas y clientes que busquen servicio en la calle serán multados a partir de enero

A partir del próximo mes de enero cualquier prostituta que ofrezca sus servicios en la calle y los clientes que los soliciten en Vila serán multados.

El Ayuntamiento está redactando una nueva ordenanza cívica en la que han participado diferentes entidades y asociaciones de vecinos del municipio. Según explicó ayer la alcaldesa de Vila, Lurdes Costa, esta ordenanza «penalizará y multará tanto al ofertante del servicio como al demandante». Asimismo, también castigará a las personas que mantengan relaciones sexuales en espacios públicos.

En estos momentos, la normativa se encuentra en los servicios jurídicos del Consistorio a la espera que den su visto bueno. Está previsto que se apruebe en el pleno del próximo mes de octubre, de forma que una vez que supere el periodo de exposición pública, se podría poner en marcha a partir de enero del año próximo.

El concejal de Participació Ciutadana, Vicent Ferrer, explicó que esta ordenanza cívica es muy más amplia y explicó que tiene como objetivo regularizar comportamientos sociales que hasta ahora no estaban contemplados en ninguna normativa municipal.

Según Ferrer, la sociedad en los últimos años ha cambiado mucho y comportamientos que antes no se daban, o bien se producían en menor medida, estarán contemplados, a partir de enero, en esta nueva ley municipal. «El objetivo es que se mejore la convivencia en la calle y en los espacios públicos», remarcó Ferrer.

El borrador de la ordenanza contempla tres tipos de faltas: leves, graves y muy graves.

Esta normativa que tiene carácter disuasorio cuenta con 14 capítulos. Además de regular la prostitución en la calle, contempla los comportamientos discriminatorios y xenófobos y los actos vandálicos como romper el mobiliario público. Esta nueva ley castiga el consumo de bebidas alcohólicas en la calle o espacios públicos, «una actitud social que ha surgido ahora», afirmó Ferrer, y en la que se regula también el botellón.

Esta ley regulará la contaminación acústica como «los aparatos con la música muy alta o bien los coches-discoteca que afectan a las vidas dentro de las casas». Asimismo, las estatuas humanas, los masajes en la calle y realizar piercings, también quedarán incluidos dentro de la ley.