Josep Maria Gili: «Comercializar las medusas es un fracaso»

"¿Por qué proliferan las medusas? ¿Qué responsabilidad tiene el hombre?
"Hay dos causas fundamentales. Una de ellas es debido al cambio climático o calentamiento general que favorece que proliferen en años bastantes cálidos pero, sobre todo, el factor fundamental que está cogiendo fuerza cada día es la sobrepesca. Se ha visto que en muchas zonas del mundo, no sólo el Mediterráneo, que la disminución de depredadores y de competidores por el alimento de las medusas ha hecho que en zonas importantes de pesca como el banco de Alaska, donde faena la flota americana, o Namibia, donde faena la flota española, se hayan cerrado a la pesca; o la relación entre medusas y peces haya cambiado de seis peces a una medusa a tres medusas por un pez en tan solo diez años. El hombre está explotando de una forma inaceptable los recursos marinos.

"¿Hay más en el Mediterráneo o no? ¿Influye la temperatura?
"El Mediterráneo no se ha quedado al margen del resto de océanos. En los últimos diez años la proliferación de medusas y la llegada a las playas se ha multiplicado progresivamente. Estamos en un hecho bastante natural. No sabemos si irá creciendo la población de medusas. Habrá fluctuaciones en los que unos años crecerá y otros disminuirá pero eso que ocurría hace 20 años con periodos de crecimiento cada diez años en las playas no ocurre. Ahora sube todos los años de forma regular. Las fluctuaciones dependerán de factores climáticos. No tenemos datos porque no ha habido ninguna campaña introspectiva en España, se ha intentado pero no se ha hecho. Hay datos de una campaña que hicimos con Greenpeace este verano en el litoral entre Menorca e Eivissa con enjambres de manchas de kilómetros de medusas. Hay muchas pero su llegada a costa dependerá del factor climático, de vientos y corrientes que llegan a la costa. Veranos muy cálidos con aguas calientes favorecen la llegada de las medusas y, en cambio, más frescos y lluviosos reducirá el número de población que llegue a la costa. "En algunos países tiene un valor gastronómico ¿Cree qué pueden ser de utilidad o son sólo depredadores marinos?
"(Risas) En Andalucía hay un proyecto para comercializar las medusas pero va a ser un fracaso. Para mí no tiene ningún sentido porque no es un recurso predecible, no sabes dónde están ni cuántas hay. En los países que comen medusas llevan centurias haciéndolo, como parte de su tradición. Se pueden comer, no es un alimento muy rico pero puede ser un complemento de la dieta. Quizás, su uso más importante, por ejemplo, podría ser como harina para piscifactorías pero es más el problema ecológico que tenemos y el efecto en los bancos de pesca que el que se puedan comer. Al menos, en el Mediterráneo es una pequeña anécdota.

"Hay muchas teorías acerca de las medusas como que pican más las pequeñas o que si se han recibido varias picaduras hay más posibilidad de que te vuelvas más alérgico. ¿Qué opina de ellas?

"Hay medusas que, por el número de células y el tamaño de tentáculos, pueden picar más que otras. Las pequeñas no es que piquen más sino que se ven menos y no huimos de ellas. Una persona nunca nos va a atacar en la playa, si nos pica es porque contactamos con ella sin darnos cuenta. Hay bastante bulo. Las medusas son una especie que no podemos evitar en las playas, pero que con buenas medidas de protección, prevención e información puede estar controlado este problema de forma natural.

"¿Qué recomienda a los bañistas cuando les pica y no tienen ningún producto a mano?
"Primero hay que prevenir. No hay que jugar con las medusas. Un tentáculo roto en la playa pica por igual aunque la medusa esté muerta. Si hay medusas no hay que bañarse y ponerse mucha crema solar. Si le ha picado, no hay que bañarse con agua dulce, sólo con salada y no rascarse, sacar el téntaculo y aplicar una bolsa de agua fría con hielo durante diez minutos para neutralizar el veneno. Además, hay que cuidar la herida que se puede infectar.

"¿Qué consecuencias puede tener la proliferanción de las medusas?
"Va a perjudicar los bancos de pesca locales y la imagen de playas . Hay que tratar el tema sin miedo, que no pasa nada. El turismo no se asusta porque haya medusas sino porque no informamos de lo que pasa y, sobre todo, no hay información de la envergadura del problema internacional.