El PP convocará a sus alcaldes para acordar medidas si el Gobierno recorta sus recurso

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, anunció ayer que su partido acordará un documento con los alcaldes populares en los próximos días para hacer frente a la reducción de recursos que tiene previsto realizar el Gobierno el próximo año y para aunar posiciones respecto a la reforma de la financiación local, que espera que se aborde de «forma conjunta» a la autonómica.

De Cospedal rebatió las explicaciones del Ejecutivo ante la posibilidad de que éste reduzca en 700 millones los recursos destinados a los consistorios. «No es verdad, el fondo de los ayuntamientos decrece», subrayó. Ante la «alarma» de los alcaldes, De Cospedal anunció que su partido se reunirá con los representantes del PP en la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) para elaborar un documento que hará público en los próximos días. En este encuentro, anunció que se abordará además la reforma de la financiación local.

A su entender, la negociación de la nueva financiación local debe abordarse de «forma conjunta» a la autonómica una vez que son los ayuntamientos los que «de manera más inmediata» prestan a los ciudadanos los servicios sociales que son competencia de las comunidades autónomas, entre ellos, los de atención a dependientes.

De Cospedal remarcó que todos los alcaldes demandan una reforma de la financiación de los ayuntamientos «independientemente del color político» y manifestó la inteción del PP de «aportar soluciones». «No haremos utilización partidista», señaló.

Desde el Ayuntamiento de Santa Eulària confiaron ayer en que no se note el recorte de fondos porque los consistorios son los que pueden ayudar a paliar la crisis con inversiones. En principio no tienen noticia de ningún recorte porque no les llega dinero directamente, sino que se canaliza a través del Govern y el Consell. «Sólo está la nueva desaladora, pero es una inversión directa del Ministerio de Medio Ambiente», explicaron fuentes del Consistorio, donde confían en que esto no afecte a la segunda fase del palacio de congresos.