La tasación de viviendas, un paso imprescindible para la compra de residencias con financiación de las entidades financieras, sufrió un gran bajón durante el segundo trimestre del año respecto al mismo periodo del año pasado.

Según los datos oficiales de valoración recogidos por el Ministerio de Vivienda, el número de peritajes entre abril y junio fue de 162 entre Vila y Santa Eulària (únicos municipios de las Pitiüses de los que se dan datos). Un año antes se habían realizado 261 tasaciones, por lo que el descenso equivale a una caída proporcional del 38%.

La ralentización de la actividad inmobiliaria alcanza también al mercado de segunda mano y parece haber afectado más a la villa del río que a Eivissa. Así, en el caso de Santa Eulària se ha pasado de 105 a 61 valoraciones, un 42%. Respecto a Vila, se ha pasado de 156 a 101 análisis de precio, un 35,25% menos.

Metro cuadrado

Las cifras del Ministerio también reflejan caídas importantes en los precios medios del metro cuadrado tasado. En ambos municipios los descensos rondan los 100 euros. En concreto, en Vila se ha pasado de un valor de 3.010 euros a 2.912 euros, mientras que en Santa Eulària la cifra ha evolucionado desde los 3.143 euros de hace un año a los 3.032 euros actuales.

La estadística distingue entre viviendas de menos o de mas de dos años. En el primer caso, el precio medio en Eivissa (es del único municipio del que se dan datos) alcanza los 3.241 euros, el más alto de Balears. Además, supone un aumento de unos 165 euros respecto al segundo tercio del año pasado.

Los datos de Vivienda ofrecen datos desglosados sólo de los municipios de más de 25.000 habitantes. Entre estas localidades, las dos representantes de las Pitiüses y Calvià copan el podio en cuanto a lugares más caros para comprar casas de segunda mano. La ciudad mallorquina es la que posee un precio por metro cuadrado absoluto mayor, 3.128 euros, y en el caso de viviendas de más de dos años (3.139 euros). En cuanto a los pisos más nuevos, Vila reina con 3.241 euros el metro.