El Ayuntamiento de Sant Josep negó ayer que haya «mafias» entre los concesionarios de playas del municipio y aseguró que los lotes fueron asignados mediante un «concurso público transparente». El Consistorio salió al paso así de las acusaciones del presidente de los concesionarios de playas de la Pimeef, César Jerez, que denunció que en los últimos años una misma familia se ha hecho con la mayoría de hamacas del municipio jugando a través de tres sociedades, con las que ha pagado «cantidades enormes de dinero» para hacerse con las concesiones y «echar a los empresarios de toda la vida».

16 lotes de 171

Desde el Ayuntamiento niegan que la mayoría de hamacas estén en pocas manos y aseguran que las concesiones están repartidas entre más de 30 empresas de las que muchas llevan más de veinte años. De hecho, aseguran que esta familia a través de sus tres empresas, sólo cuenta con 16 lotes de los 171 que hay en todo el municipio y recuerdan que hay otros empresarios que tienen lotes con un número de hamacas mayor, por ejemplo en Platja d'en Bossa.

De hecho, desde el Consistorio consideran «más legítimo» otorgar las concesiones por concurso público que de «forma aleatoria y sin ningún criterio como se hace en otros municipios de la isla». «Esta fórmula garantiza a todos los interesados una igualdad de condiciones inexistente en otros lugares».

El alcalde de Sant Josep, Josep Marí Ribas, Agustinet, se mostró muy molesto porque se ha dudado de la legalidad del concurso: «Si tiene pruebas de alguna irregularidad que lo denuncie ante el Ayuntamiento o en el Juzgado, porque hacerlo en un medio es de república bananera», lamentó el alcalde, que indicó que no se ha puesto a contar quien ha acumulado más hamacas. «Ha habido un reparto muy importante y estrictamente regido por las bases», dice el primer edil, que duda que otros ayuntamientos actúen con tanta transparencia y con tanto respeto a la ley. «Los ayuntamientos están obligados a licitar anualmente las concesiones y no todos lo hacen», remarcó Marí Ribas, que retó a Jerez a pasar un «test de legalidad».

«Si César Jerez tiene constancia de que no se ofrece un servicio de calidad por la mala relación de la empresa con sus trabajadores su obligación es denunciarlo donde toque como representante de los concesionarios con el objetivo de velar por los servicios que se ofrecen en nuestras playas», dicen desde el Consistorio, donde también resaltaron el «esfuerzo» de la celadora de playas para evitar «acciones fraudulentas» e incumplimientos en las playas. Esta trabajadora ha efectuado hasta el mes de julio 122 visitas a las calas y 73 actas de reconocimiento, con la interposición de dos sanciones graves.

Desde el Ayuntamiento aseguran que han acabado con el «abuso» de algunos concesionarios que en años pasados cobraban a 10 y a 15 euros por hamaca. Sant Josep asegura que el precio máximo autorizado para hamacas y parasoles es de seis euros y el colchón neumático tiene un coste máximo de 4,5. Jerez aseguró que este precio es «una estafa» porque en el resto de la isla se cobra cuatro euros. El alcalde de Sant Josep se mostró contrariado por las acusaciones «gratuitas» lanzadas por Jerez, a quien acusó de ser «poco serio» y de hacer unas manifestaciones «impresentables». «He intentado hablar con él hoy y no me ha sido posible, pero lo haré y también con la directiva de la Pimeef», indicó Marí Ribas.