El portavoz del Partido Popular en Balears, Carlos Simarro, tildó ayer de «pésima, decepcionante y de aspecto esperpéntico» la reunión celebrada el sábado entre el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el del Govern balear, Francesc Antich, por haber acabado «sin acuerdos reales».

Simarro auguró que la reunión «traerá un agravamiento de la crisis para los ciudadanos de las islas», por el hecho de haber finalizado sin la concreción de ningún acuerdo que pueda beneficiar a la comunidad.

«La reunión demuestra el poco peso político de Antich ante Zapatero», dijo Simarro.

El portavoz popular calificó los compromisos anunciados por Antich sobre una agilización de las obras de los convenios de carreteras con los consells insulares y de la firma de un nuevo convenio para construir el tranvía de Palma de «promesas con mucho talante pero poco talento». Según Simarro, «las encomiendas de gestión de las obras de carreteras hace tiempo que deberían ser de los consells por ley y el tranvía de Palma ha quedado en agua de borrajas».

El portavoz popular reprochó a Antich que se haya «conformado» con el acuerdo con el Gobierno central en el convenio ferroviario y ha asegurado que «de los 2.060 millones de euros que tenían que pedirse han llegado poco más de 400, de los que este año sólo llegarán tres, en pleno momento de crisis, lo que supone una miseria para un sector en dificultades».

Acerca de la reforma del sistema de financiación autonómica, Simarro afirmó que «es de juzgado de guardia el problema que sufre Balears» al respecto.