Un momento del espectáculo.

Gritos de impaciencia por parte de los niños mostraban el interés por ver a 'Les tres bessones' sobre el escenario. A falta de diez minutos para las ocho, la Bruja Aburrida salía entre aplausos y caras de lo más emocionadas: «Os voy a contar una historia... Pero sería mejor que me ayudasen, ¿no? ¿Quién queréis que me ayude a contar al historia?». «¡Les tres bessones!», gritaban los centenares de niños que ayer llenaron el parque Reina Sofía para ver esta exhibición de teatro.

Entre el público, unas niñas comentaban cuál era su 'bessona' favorita: «A mí me gusta Teresa porque va de rosa» le decía Lucía a su amiga.

La obra representada, Leonardo despertó risas y bailes entre los más pequeños, que seguían a 'Les tres bessones' divertidos. Ante el lleno total en el parque mucha gente optó por quedarse de pie en las paredes para grabar en vídeo el espectáculo o hacer fotos.

Con el final de la obra, muchos de los niños se acercaron al escenario para saludar a las tres niñas protagonistas, que se fueron rápidamente para dar pie a otro espectáculo: el show de Cachirulo y Amapola.

Dos payasos que entraron al escenario subidos en una carretilla de colores para la gracia de los 'peques', que saludaban a los dos payasos. Después de calmar la emoción de los niños, los dos artistas empezaroncon sus juegos. El primero fue un juego de manos al que todo el público participó levantando los dedos que pedían los payasos. Los más atrevidos incluso se acercaban al escenario para mostrarle sus manos a Cachirulo y Amapola.

Después de éste, otro juego y otro, siempre con la participación de los más jóvenes que reían, cantaban y bailaban en lo que, sin duda, fue un gran día para ellos. Marina Bonet