Numerosos rocieros infantiles participaron en el rocío.

A

ntes de comenzar la romería los fieles llenaron la iglesia para ofrecerle a la Virgen del Rocío una misa oficiada por el obispo de Eivissa, Vicente Juan Segura. Cantes rocieros a cargo del coro de la hermandad y las palabras del propio monseñor sirvieron para hacer la ofrenda floral que marca la tradición. «Es preciosa la labor que hacéis los rocieros de Sant Antoni tanto en la iglesia como en el municipio». Éstas fueron las palabras con las que alabó el obispo la devoción de los fieles. También estuvo acompañando a los rocieros la fallera mayor, Josefina Saiz, y el presidente de la Nostra Falla del municipio, Juan González, para homenajear a la virgen, como ya hicieran los rocieros en las fiestas de las fallas.

Hermanos de Valencia, Huelva, Granada, Eivissa y hasta de Sevilla estuvieron ayer en la misa y en la romería que recorrió las calles del pueblo bajo las primeras gotas de lluvia. Ésta no hizo que la alegría y la devoción desaparecieran. Muy al contrario, todos mostraron sus sentimientos de admiración por la virgen y emprendieron el camino. Tras recorrer las calles hacia el Ayuntamiento, donde se unieron las casi 20 carretas que participaron en la marcha. Frente al consistorio la carroza mejor decorada recibió un obsequio. Esto fue el inicio de una romería que concluirá hoy por la tarde con el regreso del 'sin pecado' o estandarte de la hermandad a la iglesia de Sant Antoni.