La construcción de la carretera de Sant Antoni costará a las arcas públicas 100,5 millones de euros, 7,3 más de lo que se había previsto en un principio (93 millones). Esto significa un ocho por ciento más de lo que marcaba el proyecto inicial, según destacan desde la Conselleria d'Obres Públiques, donde advierten de que esta obra hubiese salido más cara si se hubiera incluido la finalización del túnel de Sant Rafel.

En el proyecto inicial se preveía que el túnel tuviera alrededor de 1.200 metros, pero finalmente se ha quedado tan sólo en 650. El ahorro que ha supuesto esta medida es de 6.058.079 euros. Pero pese a que se gasta menos dinero en este concepto al parecer la empresa ha necesitado más dinero del que inicialmente se pensaba porque en su día no se tuvieron en cuenta cosas como la señalización y otras obras complementarias que la Conselleria d'Obres Públiques detallará en los próximos días. Son todos estos detalles los que contribuyen a aumentar el presupuesto en siete millones.

De esta forma, la Conselleria d'Obres Públiques gastará un total de 19 millones de euros más de lo previsto en las autovías del aeropuerto (donde el presupuesto ha aumentado en 12 millones) y de Sant Antoni.

El proyecto modificado de la carretera de Sant Antoni está expuesto al público desde el miércoles en el Consell, el Ayuntamiento de Sant Antoni, el de Vila y el de Santa Eulària. Desde Sant Antoni explicaron que están estudiando los cambios introducidos para presentar alegaciones.

Entre los cambios está la colocación de aceras en Can Guillamó, la no finalización del túnel y la creación de carriles cero en Blancadona para agilizar la circulación. No se han introducido cambios en la finca de los caballos de Sant Rafel, donde se había criticado su cercanía a la rotonda de encima del túnel