Las nuevas Normas Subsidiarias de Sant Josep reducirán en miles de metros cuadrados la construcción prevista en Cala Tarida en base al anterior planeamiento y al PTI. En total, se impedirá la construcción de más de 600 viviendas, ya que algunos sectores se eliminan por completo y en urbanizaciones ya iniciadas se obliga a reservar más suelo para zona verde.
El terreno más extenso que se desclasifica es uno de 295.000 metros cuadrados situado hacia el interior y que lleva por nombre Portmany en el que según las normas de 1986 se podían construir casi 300 viviendas para 900 habitantes. El Ayuntamiento ha optado por preservar toda esta zona por sus «valores ambientales y paisajísticos» y por su proximidad a un torrente.
También se esponjará otro de los urbanizables de esta zona, llamado es Rasos, donde el Ayuntamiento paralizó recientemente una urbanización de 186 viviendas (el 'Mirador de Cala Tarida') por incumplir una licencia concedida en 2003. Este sector cuenta con un total de 83.169 metros cuadrados y en el nuevo planeamiento se indica que sólo un 50 por ciento del total puede ir destinado a usos lucrativos. Esto significa que allí sólo se podrán construir 80 de las 186 viviendas previstas, ya que el número máximo será de diez por hectárea. 16.588 metros cuadrados de esta urbanización se deberán destinar a zona verde.
Algo parecido se hace con el sector llamado Montecarlos, que tiene las labores de urbanización (calles, alumbrado, etc.) prácticamente terminadas con proyectos para construir más de 250 viviendas. Con la nueva ordenación se marca un máximo de 125, además de delimitar un mínimo de espacio libre público de 83.359 metros.
Mirando hacia al norte, ya cerca de Cala Corral, había dos sectores en las normas de 1986 que sumaban 316.000 metros que quedan reducidos a 91.674, con un máximo de diez viviendas por hectárea. Mención especial merece Punta Grossa, donde hay diversas playitas cuyo valor natural se quiere preservar, según el Ayuntamiento. «Para hacerlo se destinan 24.897 metros del total de 35.900 del sector (el 70 por ciento) a espacio público», argumenta el concejal de Urbanisme, Josep Antoni Prats, que destaca que quedarán 7.736 m para hacer viviendas univamiliares (un máximo de siete). Los dos sectores más urbanizados de la cala, que son los más cercanos al mar y cuentan con 140.000 metros cuadrados se reconocen como suelo urbano.
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