JOSÉ LUIS MONTOYA Una familia que paga en Vila el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), el Impuesto de Circulación de Vehículos y la tasa de basuras verá incrementada su contribución tributaria en torno al siete por ciento el próximo año; o lo que es lo mismo, en 23 euros. Así lo anunció ayer el teniente de alcalde de Hacienda, Santiago Pizarro, quien justificó este incremento por la necesidad de «ajustar» los tributos municipales al IPC de los últimos cuatro años [estimado en torno al 13%], y al gran incremento que ha sufrido el pago que el Ayuntamiento debe hacer al Consell d'Eivissa por el uso del vertedero, que se sitúa en el 66 por ciento.

En relación al coste del vertedero, Pizarro matizo que se repercutirá siguiendo principios de «justicia redistributiva», de manera que «pagarán más quien produce más residuos». El Consell pasará de cobrar al Ayuntamiento 18 euros por tonelada de residuos a reclamar 30 euros, lo que se repercutirá de forma desigual. Como ejemplos, Pizarro citó que el recibo de basuras se incrementará en un 20% para los despachos y locales comerciales de menos de 100 metros cuadrados, en torno al 30% para bares, cafeterías y restaurantes, y alrededor de un 50% para supermercados, pescaderías y fruterías. Asimismo, citó el ejemplo de los amarres de puertos, que lo verán incrementado en un 100%.

Tras matizar que las tasas municipales no reportan beneficios al Ayuntamiento sino que se establecen para pagar el coste de servicios, Pizarro anunció la creación de tres nuevas tasas para 2008. Una de ellas pretende costear los servicios turísticos habilitados en Dalt Vila en el centro Madina Yabisah y los baluartes de Sant Joan i Sant Pere, y tendrá un coste de dos euros, del que estarán exentos las visitas escolares y la tercera edad. Otra, de 80 euros, se destinará al pago de las sonometrías que se encarguen a la concejalía de Medio Ambiente. Finalmente, la tercera tiene un carácter «disuasorio» y se relaciona con el corte del tráfico en la vía pública para descarga de materiales de construcción. Será de dos euros por metro cuadrado y hora.

En cuanto a los cinco impuestos municipales "que sí reportan ingresos a las arcas municipales" el de vehículos a motor y el de construcción no se incrementarán, mientras que los recibos del IBI [tributo mayoritario con 40.000 recibos emitidos el pasado año] aumentarán un 7'3%, los del IAE un 15% y los de plusvalía un 16%.

A título de ejemplo, Pizarro explicó que una vivienda de 90 metros cuadrados que este año ha pagado 203 euros pagará 221 el próximo año.
El edil recordó que Vila ajusta sus impuestos cada cuatro año, por lo que aseguró que no se incrementarán durante toda la legislatura.