OLGA QUINTANILLA/ AGENCIAS

«Es un tema que nos preocupa mucho pero ciuanto menos se hable, menos publicidad para los terroristas. La industria turística en Eivissa ha demostrado una serenidad y una madurez absoluta. Esperamos que no vuelva a suceder», dijo Molas quien añadió que «hay que confiar en la seguridad y otorgar a este tipo de sucesos la importancia justa».

En otro orden de cosas, el presidente de la Cehata afirmó que el turismo de sol y playa no puede competir en la política de precios con otros países competidores como Turquía y Croacia debido a los bajos costes en su actividad que presentan estos países. De hecho, explicó que los costes estructurales de Turquía y Croacia están un 50 y un 40 por ciento respectivamente por debajo de los gastos que genera el turismo en España. «No podemos pretender luchar a nivel de precio porque sería un suicidio colectivo», enfatizó Molas. Por ello, apostó por acometer en el sector español un cambio en el concepto del producto «lento pero seguro» para que las empresas vinculadas al turismo «sean capaces de transmitir» a los mercados internaciones que «España es algo más». «Ofrecemos seguridad, ofrecemos sanidad europea, ofrecemos comunicaciones europeas, y esto hay que tenerlo en cuenta y el cliente lo tiene en cuenta«, expuso el presidente de la CEHAT, quien a continuación detalló que el sector turístico requiere «una promisión inteligente» en los mercados internacionales.

Una de las conclusiones negativas expuestas por el presidente de la Cehat fue «el crecimiento desaforado» del turismo residencial, pues a parte de suponer «una competencia desleal« para los hoteleros «ocupa plazas de avión que utilizaban clientes extranjeros». De hecho, precisó que si únicamente el 50% de los extranjeros que eligen a España como destino sin paquete turístico se alojan en hoteles, es un hecho «muy preocupante».