El Consell ha pedido, además, que se paralicen los ingresos a la residencia de Santa Eulària «mientras los problemas no estén encarrilados». Actualmente hay 20 peticiones para ingresar. También se ofrece cobertura sanitaria, médicos y enfermeras, para la asistencia de las 27 personas ingresadas en la residencia. El personal sería del bolsín o de otro tipo de recursos. «Falta personal médico para hacerse cargo, enfermería y auxiliar de enfermería», dijo Serra. El conseller dijo, además, que «está a la espera de una contestación del Govern para que el Consell pueda contratar gente para dar apoyo a personal de la empresa».
El conseller mantuvo ayer una reunión con la oposición «dada la extraordinaria situación» para comunicarle todas las actuaciones previstas y que ya están en marcha.
Serra recordó que el Consell y la asociación de familias «han estado muy pendientes de la evolución desde que se puso en funcionamiento la residencia» y cuando empezaron a recibir las primeras quejas convocaron una reunión con la empresa Aser. El Consell dio entonces un plazo de cuatro semanas a la empresa para actuar ante las deficiencias detectadas. «Las deficiencias no se solucionaron pero sí hubo un incremento de personal y dado que hubo nuevas quejas se organizó una nueva reunión el pasado 23 de marzo», recordó el conseller. De esta reunión se extrajeron tres conclusiones: se necesita un incremento de personal, el personal necesita formación y un incremento de supervisión tanto en limpieza como en protocolos. También se solicitó la reunión de comisión de seguimiento tanto a la fundación como a la Conselleria de Presidència del Govern y se abrieron diligencias previas de inspección que comenzaron ayer con la visita a la residencia de Can Blai.
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