El hipódromo de Sant Rafel acogió los actos festivos de ayer. Fotos:GERMÁN G.LAMA

El deporte más popular de las Islas volvió a ser la principal atracción del Dia de les Illes Baleares congregando en el hipódromo de Sant Rafel a un numeroso público formado especialmente por aficionados a los trotones.

La jornada tenía previsto comenzar con actuaciones de ball pagès y con un desfile de carros típicos, pero un cambio de último momento a la espera de una mayor afluencia de gente a primera hora (las 11,30 de la mañana) hizo que las carreras de trotones inauguraran este día de asueto y celebración que conmemora la entrada en vigor del Estatut d'Autonomia balear en 1983.

Apuestas en la ventanillas y directo a las gradas a ver si el caballo elegido sale ganador. Un gesto que muchos repitieron varias veces en el día de ayer ya que nueve carreras fueron que ocuparon la mayor parte de la jornada con premios en metálico a los ganadores: un total de 5.300 euros a repartir entre las diferentes categorías. Mientras, en la pista del hipódromo se podían apreciar ejemplares de equinos nacionales e importados (en su mayoría de Francia), dirigidos por los jockeys locales que, sentados sobre sus cabriols, eran a su vez animados por familiares, amigos y aficionaldos entre el público.