R. L.
Las oficinas de ayudas a víctimas del delito (OAVD) existente en las Pitiüses atendieron más de un centenar de casos durante 2006, de los que 83 corresponden a la sede ubicada en Sant Jordi en la isla de Eivissa y 24 a Formentera.

La red de oficinas de Balears atendió el pasado año a un total de 2.491 personas, el 39 por ciento de ellas, 967, por violencia doméstica, y otro 9%, 221, por hechos delictivos contra la libertad sexual. Así se refleja en la memoria correspondiente a 2006 de las diez oficinas de la red en las islas, de las que dos están en las Pitiüses, facilitada por la Conselleria de Presidència y Esports del Govern.

El personal de dichas instalaciones abrió en 2006 un total de 484 expedientes, más de la mitad de ellos, 251, por malos tratos, y 42 por agresiones o abusos sexuales. Al respecto, el informe señala que el número de personas atendidas por violencia doméstica subió ligeramente de un año a otro, al pasar de las 954 de 2005 a las 967 de 2006. El 94% de los casos fueron protagonizaron mujeres, la mayor parte de ellas españolas (76%) y residentes en Balears, con edades comprendidas entre los 31 y los 40 años. La mayor parte de las víctimas (84%) habían sufrido agresiones con anterioridad, aunque el 65% no lo había denunciado antes. De hecho, sólo el 32% de las víctimas había interpuesto denuncia y un 8% la retiró antes de presentarla. En cuanto a los autores, la mayoría son varones, compañero sentimental (45%) o ex (47%) de la víctima. Un 49% tenía problemas con el alcohol y un 32% era adicto a las drogas. El 25% de los presuntos agresores eran extranjeros