B. ROSELLÓ
El conseller en la oposición y diputado en el Parlament, Joan Boned, recordó ayer a la consellera balear d'Obres Públiques, Habitatge i Transports, Mabel Cabrer, que la adjudicación de las obras de la carretera de Sant Antoni cuenta diversas irregularidades, según el informe de Sindicatura de Comptes correspondiente a 2005: «El documento deja claro que esta adjudicación ha sido cualquier cosa menos clara, limpia y transparente», señaló Boned. Cabrer, por su parte, manifestó que el informe de los síndicos no desvela la existencia de irregularidades, sino que realiza algunas recomendaciones.

Boned recordó que el Govern también mantiene algunas instalaciones en situación irregular, haciendo referencia a la planta de prefabricados de hormigón de Sant Jordi, sobre la que el juez ha reclamado en varias ocasiones un informe completo del proyecto de la autovía. «Primero no hacen caso al juez cuando se le reclama las cosas y tampoco a las irregularidades que se detectan en el informe, por tanto desde la misma adjudicación hasta el final de la ejecución es ilegal».

El presidente del Govern balear, Jaume Matas, también hizo referencia a las autovías de Eivissa durante la celebración de la cumbre: «Estas infraestructuras están muy lejos de lo que se había vendido. Se dijo que estaban sobredimensionadas, con ocho carriles y no ha sido así». Defendió que se trata de proyectos realizados «de acuerdo con las necesidades de Eivissa, donde hacía años que no se realizaban inversiones tan importantes».