El Govern aprueba el puerto de es Viver de 600 amarres pese a la oposición de Vila

Los técnicos que evaluaron el impacto ambiental del puerto deportivo hicieron una serie de prescripciones antes de informar favorablemente el proyecto básico. Según explicó la Conselleria balear de Medi Ambient, los promotores tendrán que compensar la pérdida de posidonia que provoquen las obras volviendo a repoblar la zona con esta misma especie. En este sentido, tendrán que hacer un estudio medioambiental sobre los efectos marinos y el impacto en la posidonia que puede tener el puerto deportivo.

De muy poco sirvieron las objeciones que pusieron la teniente de alcalde del Ayuntamiento de Eivissa, Lurdes Costa, y el concejal de Medio Ambiente, Juan Rubio, que acudieron a la reunión para expresar la oposición del Consistorio y presentar las 11.280 firmas recogidas en contra del puerto deportivo. Los representantes de la administración municipal propusieron que el proyecto quedara sobre la mesa hasta que esté redactado el Plan Director de Puertos Deportivos d'Eivissa i Formentera pero la iniciativa se rechazó con 12 votos en contra y 8 a favor.

El Ayuntamiento recordó que éste es sólo un paso más y que todavía faltan trámites, entre ellos el visto bueno del Ministerio de Medio Ambiente, que en julio de 2006 denegó al Govern balear la solicitud de adscripción de bienes de dominio público marítimo-terrestre necesaria para poder ejecutar el proyecto, entre otras cosas, porque faltaba la declaración de impacto ambiental que tenía que realizar la Conselleria balear de Medi Ambient. Lurdes Costa confía en que el proyecto quede parado de nuevo en el Ministerio porque «todavía no se han cumplido todas las prescripciones que la Dirección general de Costas realizó en su informe». El equipo de gobierno municipal insistió en que hará todo los posible «para evitar la destrucción de esta zona costera».