El equipo de gobierno del Consell rechazó ayer personarse en las causas abiertas en los juzgados por corrupción que afectan a varios municipios del PP por considerar que quien debe llevar la acusación en estos casos es la Fiscalía. «Siempre estaremos a disposición de la justicia», indicó el conseller de Presidència, José Sala, que animó a los progresistas a ejercer por su cuenta la acusación popular si así lo desean. Sala recordó que todos los casos que afectan a políticos del PP se han archivado y calificó de «casos concretos» las imputaciones de los alcaldes de Sant Josep y Santa Eulària. «Estamos contra la corrupción, usted ve brujas donde no las hay; no hay constante voluntad de favorecer intereses», añadió Sala dirigiéndose a la portavoz de la oposición, Pilar Costa, a la que también acusó de valorar de forma distinta el proyecto Eivissa Centre porque afecta al Pacte.

Costa criticó al PP de practicar «corrupción de guante blanco» por «beneficiar» intereses personales de los conselleres con el PTI o hacer leyes a medida para tapar licencias irregulares. La portavoz progresista destacó que los dos alcaldes imputados sólo son los casos «más flagrantes» de la «corrupción política disfrazada de legalidad» que practica el Consell. En este sentido también se refirió a la donación de terrenos que hizo la familia Matutes «a cambio de la cesión del teatro Pereira, puertos deportivos y adjudicación de autovías». «En vez de brindar con cava con los presuntos corruptos debería dar el mensaje de que esto no continuará pasando», dijo Costa, quien recordó que los únicos municipios que tienen juicios penales son los del PP. El equipo de Gobierno también votó en contra de otra moción en la que pedían que se revisasen las normativas urbanísticas informadas por el imputado del caso Andratx Jaume Massot. El PP rehusó entrar en debate y se limitó a decir que el ex director no firmó nada de Eivissa.