C. ALCÀNTARA
El servicio de cuidados paliativos del hospital Can Misses ha atendido a 550 pacientes, con una media de 114 al año, desde que hace cinco años se puso en marcha esta unidad con la Asociación Española contra el Cáncer y pasó posteriormente, en mayo de 2004, a integrarse al servicio de oncología del hospital Can Misses.

El 70 por ciento de los pacientes oncológicos son atendidos en su domicilio, una cobertura «bastante alta», resaltó ayer la jefa de Oncología de Can Misses, Belén González, en la presentación de los datos, ya que la media nacional está en un 25 por ciento. La unidad atiende a pacientes oncológicos, un 64 por ciento, pero su objetivo es acercar los cuidados paliativos a otros pacientes con enfermedades terminales. El 74 por ciento de los pacientes fallecen en su domicilio. «Es una cifra bastante elevada y probablemente esto es lo que desean todas las personas, fallecer entre los suyos y eso se consigue gracias a la unidad de hospitalización a domicilio», señaló la oncóloga. El 54,3% de los pacientes han necesitado atención psicológica. El apoyo familiar se hace también cuando el paciente ha fallecido con la atención al duelo.

En cinco años se han realizado 6.000 visitas, 9.000 llamadas telefónicas y se han recorrido 47.500 kilómetros con siete desplazamientos anuales a Formentera. Por sexo, el 60% de los atendidos son hombres. La edad media ronda los 68 años en el caso de los hombres y 67 en las mujeres.

El objetivo de esta unidad es ofrecer una atención de calidad a las personas que padecen una enfermedad terminal y que hayan agotado las posibilidades de un tratamiento.

El personal está integrado por un médico, una enfermera y un psicólogo y de cara al futuro se tiene la intención de contar con un asistente social. «Trabajamos con la Asociación Española contra el Cáncer para incorporar una asistente social ya que pueden colaborar en la mejora del bienestar de la familia», resaltó el gerente del Àrea de Salud, Ignacio Martínez.

El Àrea de Salud ha organizado unas Jornadas de Actualización en Cuidados Paliativos en conmemoración con los cinco años de puesta en marcha de este programa. La primera de las sesiones, que comenzó ayer, versó sobre la atención al paciente no oncológico y estuvo a cargo de los responsables de Cuidados Paliativos del hospital Joan March, de Palma, Joan Santamaria, y la internista de Can Misses Natalia Costa. La coordinadora de equipos de Atención Primaria, Pilar Rapún, explicó que las jornadas «van dirigidas a médicos de cualquier especialidad que pueda atender a pacientes con enfermedades avanzadas». Los aspectos éticos del final de la vida, la difusión del protocolo de sedación que tiene Can Misses y la comunicación con el paciente terminal serán otras de las cuestiones a tratar.