Por otro lado, también exculpa a varios antiautopistas que fueron acusados por los hechos acaecidos el 8 de marzo, la segunda vez que los antidisturbios entraron en Can Malalt. Estaban denunciados tres activistas y los agentes de la Guardia Civil. Al respecto, el juez dice que se produjeron empujones, aspavientos y manotazos de carácter leve en un contexto de conflictividad social que «desplaza cualquier atisbo de dolo penal». En este sentido ordena el archivo por no poder aclarar las versiones contradictorias. Tan sólo recuerda que se tendrá que celebrar un juicio de faltas contra un antiautopista por haberle dicho a un agente «hijo de puta».
En el caso del funcionario y el concejal, que estaban acusados por falsedad documental, el juez considera que no existe prueba de posible invención de las actas previas de ocupación de las fincas expropiadas para la ejecución de la autovía al aeropuerto. También se exculpa a la UTE Accesos Ibiza y al Govern de delitos de allanamiento de morada y expropiación ilegal. En todos estos casos el juez no ve responsabilidades penales «sin perjuicio de las irregularidades administrativas que puedan existir».
El 13 de marzo se produjo otro enfrentamiento en el que resultaron denunciados cuatro antiautopistas, entre ellos Fanny Tur y Albert Prats -a los que se imputaban delitos de coacciones, resistencia y desórdenes públicos-, además del representante de la UTE y los agentes de la Guardia Civil. Todos han quedado exculpados, igual que otros seis activistas que se enfrentaron a las máquinas el 14 de marzo. También se archiva la denuncia de Pep 'Malalt', que no podía acceder a su vivienda. El juez considera que aunque es lamentable que no haya respuesta legal, la vía penal no es la más idónea. También se archivan más denuncias, una por expropiación ilegal contra la CAIB, otra contra dos activistas y una tercera contra agentes.
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