OLGA QUINTANILLA
CORRESPONSAL EN MADRID
La Comisión de Interior del Congreso de los Diputados aprobó ayer por unanimidad dos iniciativas del Partido Popular en la que se solicitaba la creación de dos cuarteles de la Guardia Civil, uno en Sant Joan de Labritja y otro en Formentera. Las iniciativas, que fueron defendidas por el diputado ibicenco del PP, Enrique Fajarnés, contaron con el apoyo pactado previamente del diputado socialista José Ramón Mateos. El parlamentario popular confía en la palabra del director general de la Guardia Civil, Joan Mesquida, para impulsar estos dos proyectos. Así, la Cámara Baja insta al Gobierno a la creación en Sant Joan de «un cuartel de la Guardia Civil con identidad propia y no con carácter auxiliar así como a dotarlo de los medios materiales y personales suficientes para garantizar la seguridad en el término municipal».

Fajarnés recordó que el puesto de la Guardia Civil depende de la unidad de Sant Antoni, a más de 20 km. «La unidad de Sant Joan cuenta con cuatro efectivos y en horario limitado, pues a partir de las dos de la tarde las llamadas que se desvían a San Antonio, lo que supone, en caso de urgencia, un retraso de las acciones, además de una falta de conocimiento del territorio municipal por las patrullas que hasta allí se desplazan», dijo.el parlamentario.

Asimismo, denunció la oleada de robos que se vienen sufriendo desde hace dos años que han provocado «una razonable preocupación social» que ha motivado esta demanda por parte de la corporación municipal y del Senado. Respecto a la de Formentera, el diputado recordó que «la realidad es que la situación del actual cuartel de la Guardia Civil de Formentera y los anexos de vivienda de verano son del todo lamentables y hace que sea necesaria de forma urgente la construcción de uno nuevo en condiciones y acorde a los tiempos presentes», dijo.

Por otro lado, el diputado socialista José Ramón Mateos destacó el consenso conseguido entre todos los grupos respecto a este tema y recordó que esto se hace «gracias a un gobierno socialista, que tiene una apuesta clara y decidida por los temas de seguridad».

PSOE y PP presentaron ayer en la Comisión Constitucional del Congreso nueve enmiendas a la reforma del Estatut balear en las que recogen propuestas de IU-ICV y ERC, la mayoría modificaciones sobre el capítulo de derechos y deberes. Pese a ello, estas dos formaciones mantuvieron su abstención en la votación del texto, que ha sido apoyado por PSOE, PP, CiU y PNV y enviado al pleno del Congreso de la semana que viene para la aprobación definitiva en esta Cámara. El proyecto pasará después al Senado, ya el año que viene, y podrá entrar en vigor antes de las elecciones autonómicas de 2007. Isaura Navarro (IU-ICV) explicó que su partido pasará de la abstención al voto a favor de la reforma si en lo que resta de tramitación se admite que el conocimiento del catalán sea reconocido como un deber. Según el diputado socialista , José Ramón Mateos, hay que felicitarse del acuerdo conseguido con el Estatut y felicitó al PP por haberse unido a la aprobación de estos textos.