J. MESTRE/T. BLASCO
El president del Govern, Jaume Matas, mostró ayer su preocupación por las negociaciones del Estatut y dijo que aceptará cualquier fórmula que garantice 3.000 millones en inversiones para Balears. Matas apuntó que estaría dispuesto incluso a aceptar esta inversión extraordinaria aunque no figure en el Estatut, con otra fórmula, pero recalcó que los 3.000 millones eran «innegociables». Matas cree que las propuestas que ha hecho hasta ahora el Gobierno central para sustituir el artículo de los 3.000 millones son únicamente «brindis al sol». La delegación del PP que viajó ayer a Madrid para negociar con el PSOE también mostró su desánimo ante el futuro del Estatut. Los socialistas han prometido presentar nuevas propuestas, pero desde las filas populares destacaron que la alternativa a los 3.000 millones son ambiguas y no resuelven el problema de las Islas. Francesc Antich, por su parte, adoptó un tono conciliador y explicó, tras la reunión celebrada en el Congreso, que PSOE y PP buscan fórmulas que no pasen ni por fijar en el Estatut una cantidad fija de 3.000 millones ni por remitirse al PIB.

El secretario general de los socialistas indicó que si el acuerdo se produce antes del martes no haría falta solicitar una nueva prórroga (la séptima).

A la reunión de ayer asistieron representantes de los grupos Popular y Socialista en el Congreso. Por parte del PP estatal, Soraya Sáenz de Santa María y, por parte del PSOE estatal, el portavoz del grupo parlamentario, Diego López Garrido.