El equipo de gobierno aprobó ayer con los votos a favor del Pacte el nuevo convenio de carreteras que firmará la institución con el Ministerio de Fomento, que supondrá una aportación estatal de 68,8 millones de euros para invertir en la red secundaria pitiusa durante los próximos diez años. El conseller del Pacte Joan Boned destacó que gracias al gobierno del PSOE la consellera de Vies i Obres podrá acometer las mejoras necesarias en las carreteras sin hacer más autovías, algo que no ocurría en tiempos del PP, cuando sólo se aportaron 13 millones. Boned explicó también que, de esta forma, Madrid podrá controlar las obras que se ejecutan aquí. «No les permitirán según qué alegrías», remarcó el conseller, que aseguró que el Gobierno hace bien en no fiarse del PP de las islas. «Todo el problema se debe a lo que han hecho ustedes con otros convenios, en los que han utilizado las inversiones para dar lo que les ha dado la gana», en referencia a las polémicas autovías. La consellera de Vies i Obres, Stella Matutes, destacó que están dispuestos a que se firme cuanto antes, aunque recordó que Zapatero no ha cumplido sus compromisos al no hacer un convenio independiente del anterior. «Si se firma no será gracias a usted, señor Boned», dijo Matutes, que aseguró que el conseller ponía como condición para firmar el convenio que parasen las obras de las autovías. La consellera también mostró su temor a que si un pacto de izquierdas llega a gobernar el convenio no se ponga en marcha. «Seguridad sí, barbaridades no», le replicó Boned, que espera que el Govern y el Consell se aclaren y se pongan de acuerdo en este tema.

El Consell también aprobó por unanimidad la modificación del proyecto de remodelación de la carretera de Sant Rafel a Santa Eulària, actualmente en ejecución. Matutes justificó los cambios por tratarse de un proyecto antiguo en el que además han surgido algunos contratiempos, como el hallazgo de numerosas tuberías y líneas eléctricas privadas al excavar. La modificación incluye el soterramiento de tendidos aéreos y la construcción de aceras desde Sant Rafel al espacio polideportivo. El coste aumenta en 1,1 millones de euros, un 18 por ciento respecto al precio inicial. El Pacte votó a favor porque considera positivo que se soterre, aunque recordó que este proyecto se pagará con la fórmula del peaje a la sombra, que los progresistas critican.