MAITE ALVITE
El Pacte de Santa Eulària trató ayer sin éxito que se debatiera en el pleno sobre el caso Cala Nova y las declaraciones que hizo al respecto ante el juez el primer teniente de alcalde, Vicent Riera, que ayer estaba en Londres. Media hora antes de que comenzara la sesión plenaria, los progresistas dieron entrada en el Consistorio a una moción de control para que el alcalde diera explicaciones sobre el funcionamiento de la junta de gobierno local, ya que, según la oposición, de las declaraciones que hizo Riera en el juicio seguido contra él por un presunto delito de prevaricación en la concesión de la licencia del restaurante de su primo se desprendía que «el funcionamiento de dicho órgano no es democrático y que el papel que juegan los miembros del PP que la integran es nulo». Cuando el Pacte quiso tratar la moción de control, el alcalde, Vicent Guasch, se negó a debatir las «tonterías» que ponía el escrito, arguyendo también que se había presentado en el último momento. El portavoz del Pacte de Santa Eulària, Carlos Salinas, intentó aprovechar entonces el turno de preguntas. «Te escucharé con mucho gusto» replicó Guasch a Salinas, que a continuación le pidió, entre otras cosas, que aclarara si «va a pedirle a Riera que dimita como concejal por su declaraciones en el juicio por prevaricación». También le preguntó «si va a abrir una investigación interna para aclarar quien es la 'mano negra' que según el fiscal existe en los asuntos urbanísticos del Ayuntamiento para agilizar algunos expedientes de obras» y si «es cierto que los miembros de la junta de gobierno local siempre actúan según los informes técnicos y jurídicos municipales y no tienen criterio propio sobre los asuntos a tratar y votan con total desconocimiento de los mismos». El primer edil no contestó ninguna de estas cuestiones y se limitó a pasar a otro asunto.