G.ROMANI
El conseller insular de Medio Ambiente, Pep Mayans, anunció ayer que la puesta en marcha de la planta de transferencia de Formentera situada en es Cap de Barbaria, prevista para hoy domingo, queda aplazada unos diez días, posiblemente hasta finales de agosto o principios de setiembre por retrasos en las obras.

«El viernes, los técnicos de Medio Ambiente del Consell Insular, los aparejadores del departamento de Obras del propio Consell Insular, juntamente con técnicos de la UTE adjudicataria de las obras -explicó Mayans-, realizamos una inspección de los trabajos y pudimos constatar una serie de carencias, deficiencias o retrasos que impiden que mañana (hoy para el lector) la planta comience a funcionar». Según indicó Mayans, en el informe realizado al finalizar la inspección, se señala «las instalaciones aunque en un grado elevado de ejecución, no están finalizadas conforme al proyecto aprobado, siendo imprescindible para la puesta en funcionamiento que se finalicen, entre otros los siguientes trabajos -leyó Mayans del informe-, instalación eléctrica en el interior de cada uno de los edificios así como el nivel del alumbrado exterior, instalación de equipos de ventilación y desodorización de la nave, finalización completa del edificio de vestuarios, instalación de sanitarios, fontanería, puesta en marcha de instalaciones de agua en diferentes edificaciones, agua potable y sistemas de bombeo y acondicionamiento de la zona de aportación voluntaria particular y acondicionamiento y limpieza general de toda la superficie».